La URSS continuará siendo autosuficiente en petróleo, según la CIA

Al término de un seminario celebrado en el Centro de Investigaciones Rusas de Harward, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) reveló un informe sobre la capacidad de producción de petróleo en la URSS que predice que Moscú no necesita importar hidrocarburos en 1985.Las consecuencias políticas de este documento son contradictorias con las publicadas también por la CIA en 1977, cuando anunció que los soviéticos verían reducir su producción de petróleo en los próximos años, lo que lustificaría su política de expansión hacia los yacimientos de petróleo del golfo Pérsico.

Actualmente, la UR...

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Al término de un seminario celebrado en el Centro de Investigaciones Rusas de Harward, la Agencia Central de Inteligencia (CIA) reveló un informe sobre la capacidad de producción de petróleo en la URSS que predice que Moscú no necesita importar hidrocarburos en 1985.Las consecuencias políticas de este documento son contradictorias con las publicadas también por la CIA en 1977, cuando anunció que los soviéticos verían reducir su producción de petróleo en los próximos años, lo que lustificaría su política de expansión hacia los yacimientos de petróleo del golfo Pérsico.

Actualmente, la URSS produce unos doce millones de barriles diarios de petróleo, de los cuales 1,5 millones van destinados a la exportación, cifras que sitúan a los soviéticos como primeros productores mundiales de oro negro, seguidos de Arabla Saudí, cuya producción diaria se eleva a 10,4 millones de barriles.

Inicialmente, la CIA anunció que durante el quinquenio 1980-1985 la. producción de petróleo soviético declinaría entre ocho y diez millones de barriles diarios, al tiempo que subiría el consumo interno, obligando a Moscú a importar unos 3,5 míllones de barriles diarios en 1985.

Fue sobre esta base que los estrategas políticos norteamericanos fundaron sus temores sobre el deseo soviético de controlar los pozos de petróleo del Próximo Oriente. La invasión de Afganistán en diciembre de 1979 y la crisis de Irán a lo largo de 1980 aportaron elementos suplementarios a los, temores norteamericanos lanzados por la CIA.

Las estimaciones de la CIA dan actualmente unas previsiones de producción de petróleo en la URSS que pueden oscilar entre diez y once millones de barriles diarios en 1985, índice que bastaría ampliamente para mantener el consumo interno sin necesidad de depender de importaciones, según los expertos del seminario de Harward.

Por su parte, la Unión Soviética prevé en su plan quinquenal 1980-1985 una producción de 12,4 a 12,9 millones de barriles diarios a finales de 1985.

Otro de los elementos analizados en el seminario de sovietólogos en la Universidad de Harward fue la capacidad de exploración y explotacion de nuevos yacimientos de h,idrocarburos en la zona soviética de Siberia. Consideraron, por otra parte, el incremento de producción de gas natural.

El factor inversión y tecnología fue considerado como vital para el futuro de la explotación de pozos petrolíferos en Sibenía. Gran parte del material para perforación procede de países occidentales. Destaca la participación de Japón en capital y tecnología para la extracción de las riquezas del suelo soviético.

Las correcciones de la CIA en su último informe sobre el petróleo soviético contradicen en parte la argumentación política norteamericana de que la URSS necesita controlar la zona del golfo Pérsico para compensar sus necesidades energéticas internas. No excluye, sin embargo, que los soviéticos podrían intentar dominar un día la región del golfo Pérsico para «controlar» el suministro de energía hacia países occidentales, los europeos en particular, dependientes en un 70% del petróleo que surge de las arenas y plataformas marinas del área del golfo Pérsico.

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