Eduardo Sotillos defiende la profesionalidad frente a la ideología
«No me interesan los colores políticos del personal de Radio Nacional de España, sino su trabajo profesional», declaró a este periódico Eduardo Sotillos, director de RNE, que ha pronunciado una conferencia en Sevilla sobre La radio total, dentro del cielo sobre radiotelevisión pública organizado por la Diputación Provincial.
Según Eduardo Sotillos, hay que acostumbrarse a que cualquier profesional de la radio pueda tener una adscripción o una ideología política determinada, «aunque no sería honesto que esta vertiente trascienda de forma rotunda a su función dentro de la radi...
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«No me interesan los colores políticos del personal de Radio Nacional de España, sino su trabajo profesional», declaró a este periódico Eduardo Sotillos, director de RNE, que ha pronunciado una conferencia en Sevilla sobre La radio total, dentro del cielo sobre radiotelevisión pública organizado por la Diputación Provincial.
Según Eduardo Sotillos, hay que acostumbrarse a que cualquier profesional de la radio pueda tener una adscripción o una ideología política determinada, «aunque no sería honesto que esta vertiente trascienda de forma rotunda a su función dentro de la radio». Rechazó firmemente, por otra parte, que Radio Nacional se haya «enrojecido» tras su llegada a la dirección, subrayando: «Tal vez lo que ha sucedido es que se ha desleído algún otro color».
La fórmula de la «radio total» se complementa con otros conceptos: abierta, libre y en directo.
En opinión del director de RNE, hay que partir de la base de que el día no se puede compartimentar en bloques cerrados para cada sector de la audiencia, dando por supuesto que siguen la radio a determinadas horas. «Se trata de interesar a la generalidad de los oyentes dando microespacios sobre temas vinculados a la actualidad, sin agotarlos, y en un estilo que haga identificable a la cadena durante las veinticuatro horas del día», matizó.
Los otros dos canales, Radio 2 y Radio 3, tienen una función complementaria del principal, ofreciendo música y cultura no libresca. Todo ello dentro del máximo respeto al oyente, ya que Radio Nacional sólo se permite una beligerancia: la defensa de la democracia y la Constitución. «En lo demás», concluyó Eduardo Sotillos, «somos o pretendemos ser absolutamente imparciales y objetivos, como estará comprobando, sin duda, la comisión parlamentaria que controla nuestros contenidos mes a mes».