Falleció el cineasta Mario Camerini

El realizador cinematográfico italiano Mario Camerini falleció ayer, a los 85 años de edad, en la localidad de Gardone Riviera, cerca de Brescia, en el norte de Italia. Maestro de la comedia de los años treinta, el cineasta puso en marcha las características que más tarde se iban a concretar en el género de la comedia a la italiana. Autor de una amplia filmografía, realizó su última película, Don Camilo y el joven de hoy, en 1972.Mario Camerini nació en Roma en 1895. Comenzó la carrera cinematográfica como ayudante del director Augusto Genina. En 1923, dirigió su primera película, ...

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El realizador cinematográfico italiano Mario Camerini falleció ayer, a los 85 años de edad, en la localidad de Gardone Riviera, cerca de Brescia, en el norte de Italia. Maestro de la comedia de los años treinta, el cineasta puso en marcha las características que más tarde se iban a concretar en el género de la comedia a la italiana. Autor de una amplia filmografía, realizó su última película, Don Camilo y el joven de hoy, en 1972.Mario Camerini nació en Roma en 1895. Comenzó la carrera cinematográfica como ayudante del director Augusto Genina. En 1923, dirigió su primera película, Jolly, clown de circo. Desde sus primeras realizaciones, Camerini destacó por su seguridad técnica y la eficacia comercial de sus filmes.

Durante los años anteriores a la segunda guerra mundial, fue uno de los directores más importantes y conocidos de Italia, donde sus comedias, amables y limpias, denominadas más tarde como género de «películas de teléfonos blancos», marcaron un estilo de realización en el cine italiano. Entre sus comedias destacaron ¡Qué sinvergüenzas son los hombres!, Daro un milione y Grandes almacenes.

El cineasta italiano cultivó también con éxito el género histórico, en Il cappello a tre punte y Los novios. Después de la segunda guerra mundial, la obra de Mario Camerini siguió con parecidas características. En esta época su filme más ambicioso fue La ilusión rota (1948), donde el autor intentó un cine neorrealista, que más tarde se afirmaría en otros autores a través de manifiestos y películas que recogían las necesidades y el ambiente social de las ciudades de la posguerra. En los años cincuenta realizó Los héroes del domingo, Ulises, La bella campesina y Vacaciones en Ischia. A continuación rodó películas como Crimen en Montecarlo (1960), Venganza siciliana (1961) y Delito casi perfecto (1966).

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