Entrevista:

Antoni Muntadas: "Me intereso por el poder de las imágenes manipuladas"

Exposición de instalaciones, material gráfico y "videotapes"

A partir de mañana, y hasta el próximo 7 de enero, el madrileño Museo de Arte Contemporáneo presenta tres videotapes del artista barcelonés Antoni Muntadas, director del seminario sobre New Media / Media Culture, en Massachusetts (EE UU). Paralelamente, la galería Vandrés presenta dos instalaciones recientes del mismo artista, así como material gráfico de sus trabajos realizados a lo largo de los últimos cinco años. En el fondo, esta muestra constituye una reflexión sobre el poder de las imágenes manipuladas.

No inaugura Muntadas sus exposiciones; deja que la galería abra sus puertas a ...

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A partir de mañana, y hasta el próximo 7 de enero, el madrileño Museo de Arte Contemporáneo presenta tres videotapes del artista barcelonés Antoni Muntadas, director del seminario sobre New Media / Media Culture, en Massachusetts (EE UU). Paralelamente, la galería Vandrés presenta dos instalaciones recientes del mismo artista, así como material gráfico de sus trabajos realizados a lo largo de los últimos cinco años. En el fondo, esta muestra constituye una reflexión sobre el poder de las imágenes manipuladas.

No inaugura Muntadas sus exposiciones; deja que la galería abra sus puertas a la hora mañanera acostumbrada. Tampoco siente predilección extrema por las entrevistas cara a cara; se entusiasma, más bien, con una charla telefónica al filo de la medianoche.Pregunta. ¿Muntadas?

Respuesta. Sí.

P. Esta mañana acordamos, mientras montaba usted su exposición, que hablaríamos de ella por teléfono.

R. Sigo estando de acuerdo. ¿Por dónde empezamos? Puedo indicarle que estoy solo en un despacho.

P. Imagínese que entra un espectador en la galería, deseoso de ver cuadros o esculturas, y se encuentra con su propuesta visual. Usted ha prometido retenerle. ¿Qué haría para lograrlo?

R. Le explico que mis trabajos, mal conocidos en España, implican ciertas dificultades, pues su lectura no cuenta con un código sólidamente establecido. El tiempo de lectura de un cuadro, por ejemplo, suele durar unos segundos. Aquí es preciso un detenimiento mayor.

P. ¿Por qué esa sed de lectura ajena?

R. Porque sin espectador no hay obra. La audiencia es la encargada de cerrar el ciclo. Lo que ocurre es que en un trabajo contextual, como el mío, ese cierre depende de múltiples factores: psicológicos, de clima, de situación...

P. A usted se le asocia casi exclusivamente al video.

R. Dejé de pintar en 1970. Desde entonces, sí, he dedicado bastante atención al video. Pero no hasta el punto de merecer una etiqueta abusiva y reductora. Por ejemplo, lo que presento ahora en la galería Vandrés permite una lectura más rápida. Esta exposición estuvo a punto de llamar Sin textos. Porque pienso que en los años setenta hemos abusado mucho de los textos, mientras que mis creaciones últimas son más sintéticas y se apoyan en lo estrictamente visual. Titular así, Sin textos, era un residuo innecesario de textualidad. Preferí borrarlo.

Entre dos luces

P. Y el título borrado se ha convertido en imagen: una bombilla y una vela.R. Juego con la idea de dos realidades, de dos maneras de informar (por teléfono o en vivo), de dos construcciones. Las dos son verdaderas. En la vitrina de la galería aparecen la vela y la bombilla. Detrás, ya en el interior, hay una ampliación fotográfica de esos dos elementos. La bombilla ilustra lo artificial, al igual que la fotografía; la vela conecta con lo natural, al igual que el montaje exterior de la vitrina. Pero ambas visiones tienen la misma fuerza de veracidad.

P. ¿Qué más puede verse?

R. Al fondo hay un carrusel de ochenta diapositivas que se proyectan sobre un televisor apagado, situado a esa altura que suelen otorgarle en los bares. Son imágenes recopiladas en revistas y periódicos, donde conviven los anuncios y los reflejos sociopolíticos. A mí me interesa mucho la publicidad, tal vez nefasta a primera vista, pero fértil desde una segunda lectura, entre líneas y con ironía. En definitiva: todo esto tiene que ver bastante con una reflexión sobre el poder de las imágenes manipuladas.

Como conversamos sin vernos, dejo de tomar notas. Y recuerdo que Muntadas vive en Estados Unidos desde 1972. Allí ha mostrado sus trabajos en el Instituto Cultural Centrum de Antwerpen, en Vancouver Art Gallery, en P. S. 1 y en The Kitchen (Nueva York). Ha participado también en numerosas bienales europeas. Y uno de los videotapes que ahora pueden verse en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid, Liege 12-9-77, fue emitido por la primera cadena de la Radiotelevisión Belga. A partir de lo que acontezca en la galería Vandrés durante la muestra, se elaborará un catálogo-documento.

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