Un italiano ganó el "mediocre" Festival de Locarno
El Leopardo de Oro, gran premio del 33º Festival Internacional de Cine de Locarno (Suiza), ha sido concedido el pasado domingo a la película italiana Maledetti, vi ameró (Malditos, os amaré), de Marco Tullio Giordano. Participaron en este festival veintiocho países, que aportaron noventa películas. Los críticos asistentes han definido el certamen como «mediocre y poco satisfactorio».El Leopardo de Plata, premio especial del jurado, fue atribuido al director americano Robert Gardner por su obra Clarence and Angel.
Un francés, Jacques Bral, y un grupo de teatro holandés, por...
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El Leopardo de Oro, gran premio del 33º Festival Internacional de Cine de Locarno (Suiza), ha sido concedido el pasado domingo a la película italiana Maledetti, vi ameró (Malditos, os amaré), de Marco Tullio Giordano. Participaron en este festival veintiocho países, que aportaron noventa películas. Los críticos asistentes han definido el certamen como «mediocre y poco satisfactorio».El Leopardo de Plata, premio especial del jurado, fue atribuido al director americano Robert Gardner por su obra Clarence and Angel.
Un francés, Jacques Bral, y un grupo de teatro holandés, por su participación en una película de Eric van Zuylen y Marja Kok, fueron los premios de bronce otorgados por el jurado, que presidió el brasileño Carlos Diegues.
El Festival de Locarno es uno de los más antiguos del mundo y siempre se ha encontrado abierto a todas las tendencias, aunque últimamente han mostrado los encargados de la selección de películas un interés especial por los documentales. Esta voluntad de búsqueda del realismo es lo que ha conducido al certamen, según aliunos, a una cierta trivialidad.