Cartas al director

Agresiones"valencianeras"

La agresión perpetrada el viernes día 11 contra el presidente de la Diputación de Válencia, Manuel Girona, no debería de extrañar a nadie a estas alturas. El País Valenciano está sufriendo, desde que comenzó a vislumbrarse una posibilidad nacional autónoma y de izquierdas, los embates de la derecha más reaccionaria del Estado y más beligerante contra la democracia. Los sucesos del viernes tenían como pretexto el boicoteo al catalanismo explicitado por Girona en un día -ioh, casualidad!- que se discutía igualmente la aprobación de los presupuestos, con conocidas diferencias entre PCPV-PSPV y UC...

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La agresión perpetrada el viernes día 11 contra el presidente de la Diputación de Válencia, Manuel Girona, no debería de extrañar a nadie a estas alturas. El País Valenciano está sufriendo, desde que comenzó a vislumbrarse una posibilidad nacional autónoma y de izquierdas, los embates de la derecha más reaccionaria del Estado y más beligerante contra la democracia. Los sucesos del viernes tenían como pretexto el boicoteo al catalanismo explicitado por Girona en un día -ioh, casualidad!- que se discutía igualmente la aprobación de los presupuestos, con conocidas diferencias entre PCPV-PSPV y UCD. Pero no nos engañemos: la agresión fue posible sólo por la pasividad que envuelve a la izquierda valenciana.De una vez por todas hay que decir claramente que, pese a quien pese, el catalán del principado, el valenciano y el mallorquín son variantes dialectales de la misma lengua común; que reconocer esa unidad no implica necesariamente la defensa política de los països catalans, postura, por otro lado, respetable; que los problemas de identidad, si tales hubiera en esta reyerta, no deben dirimirse a mamporros; que en un País Valenciano mayoritariamente de izquierdas los agresores valencianeros no pueden seguir campando por sus respetos./

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