Expectación ante el viaje que inicia hoy a Europa el secretario de Estado norteamericano

Edmund Muskie, el nuevo secretario de Estado norteamericano, inicia hoy un viaje a Bruselas y Viena, en medio de un ambiente de gran expectación política, dadas las actuales circunstancias de las relaciones entre Estados Unidos y los países aliados de Europa occidental. Muskie intentará convencer a los países del Mercado Común de que apliquen, como está previsto, sanciones económicas, comerciales y diplomáticas contra Irán a partir del próximo sábado día 17.Muskie va a Bruselas y Viena, después de su reciente acceso a la dirección de la política exterior norteamericana en sustitución de Cyrus ...

Edmund Muskie, el nuevo secretario de Estado norteamericano, inicia hoy un viaje a Bruselas y Viena, en medio de un ambiente de gran expectación política, dadas las actuales circunstancias de las relaciones entre Estados Unidos y los países aliados de Europa occidental. Muskie intentará convencer a los países del Mercado Común de que apliquen, como está previsto, sanciones económicas, comerciales y diplomáticas contra Irán a partir del próximo sábado día 17.Muskie va a Bruselas y Viena, después de su reciente acceso a la dirección de la política exterior norteamericana en sustitución de Cyrus Vance, que dimitió por diferencias con el presidente Carter por la intervención militar que intentó rescatar, sin éxito, a los rehenes de Teherán. En la capital belga participará en la tradicional sesión de primavera de los quince ministros de Asuntos Exteriores de los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que, dada la delicada situación producida por la invasión soviética de Afganistán y la crisis de Irán, se reunirán conjuntamente con sus colegas de Defensa.

Después de Bruselas, y con la esperanza de un apoyo general del conjunto de países miembros de la OTAN, Muskie viajará a Viena, con motivo del 25º aniversario de la firma del tratado de paz en Austria. Sin embargo, la clave de la estancia de Muskie en la capital austríaca será la entrevista que mantendrá con su homólogo soviético, Andrei Gromiko. Se tratará del primer encuentro de alto nivel entre responsables de las dos superpotencias, después de la invasor de Afganistán.