Movilización social en favor de la libertad de expresión

La Coordinadora para la Libertad de Expresión, integrada por partidos políticos, centrales sindicales y asociaciones culturales y profesionales, expuso ayer en rueda de prensa, a través de Juan Antonio Bardem e Ignacio Sotelo, la necesidad de una movilización social de sensibilidad e información, junto con las interpelaciones parlamentarias, frente a los recientes procesos a profesionales de distintos medios de expresión cultural.Juan Antonio Bardem, tras explicar la formación de la coordinadora y su carácter abierto, unitario y democrático, anunció como primer acto público una cena de solidar...

La Coordinadora para la Libertad de Expresión, integrada por partidos políticos, centrales sindicales y asociaciones culturales y profesionales, expuso ayer en rueda de prensa, a través de Juan Antonio Bardem e Ignacio Sotelo, la necesidad de una movilización social de sensibilidad e información, junto con las interpelaciones parlamentarias, frente a los recientes procesos a profesionales de distintos medios de expresión cultural.Juan Antonio Bardem, tras explicar la formación de la coordinadora y su carácter abierto, unitario y democrático, anunció como primer acto público una cena de solidaridad y desagravio el próximo día 24, «con aquéllos que, por expresarse libremente, son perseguidos, procesados, encarcelados o privados de su actividad laboral, por la vigencia de leyes y prácticas contrarias a la Constitución, inadmisibles en una sociedad democrática».

Aunque no hay un recuento exacto de procesados, alrededor de setenta periodistas tienen diligencias abiertas, y unos seis editores, procesados. En la rueda de prensa intervinieron Pilar Miró, directora de El crimen de Cuenca, procesada por el Juzgado Militar, actualmente en libertad provisional, sin poder ausentarse de Madrid. La cineasta declaró que «todos estamos en libertad provisional». Imanol Uribe se refirió a la negativa de protección oficial a su película El proceso de Burgos, y Francisco García Salve, condenado a tres años por su libro Yo creo en la clase obrera, insistió en la responsabilidad del Gobierno Suárez. Hubo referencias al editor de El libro rojo del cole, la condena de dos artistas plásticos, Antonio Gades y el Teatre Lliure.