La UNED, firme, en sus reivindicaciones ante el Ministerio

Representantes de todos los colectivos de la Universidad Nacional de Educación a Distancia acordaron ayer asumir institucionalmente ante el Ministerio de Educación y Ciencia las reivindicaciones de soluciones definitivas para los graves problemas de esta universidad, que llevaron a su rector, Tomás Ramón Fernández, a amenazar con su dimisión.Las dificultades económicas de los centros. asociados de la UNED y la inaplazable necesidad de contar con un edificio propio han sido la constante preocupación del rector a lo largo del año que lleva desempeñando el cargo, sin obtener otra cosa que promes...

Representantes de todos los colectivos de la Universidad Nacional de Educación a Distancia acordaron ayer asumir institucionalmente ante el Ministerio de Educación y Ciencia las reivindicaciones de soluciones definitivas para los graves problemas de esta universidad, que llevaron a su rector, Tomás Ramón Fernández, a amenazar con su dimisión.Las dificultades económicas de los centros. asociados de la UNED y la inaplazable necesidad de contar con un edificio propio han sido la constante preocupación del rector a lo largo del año que lleva desempeñando el cargo, sin obtener otra cosa que promesas y nunca soluciones efectivas.

La pasada semana el ministro, Iñigo Cavero, urgido por una carta que le envió el rector, en la que le anunciaba su intención de dimitir, le prometió poner en marcha la normativa que permitiría resolver en parte los problemas económicos de los censos asociados de la UNED, que actualmente dependen exclusivamente de la voluntad y recursos económicos de sus respectivos patronatos. Asimismo, el señor Cavero se comprometió a poner en marcha las medidas necesarias para que la UNED cuentecon edificio propio.

Anteayer el director general de Programación e Inversiones comunicó al rector que había redibido instrucciones del ministro para poner en marcha el expediente que permita la terminación de obras y acondicionamiento del edificio circular, ubicado en el campus de la Moncloa, que ya en 1973 había sido adjudicado a la UNED por una orden ministerial, sin que esta adjudicaciónse hubiese hecho efectiva.

Los diversos colectivos de la UNED, que no se flan mucho de las promesas ministeriales, están dispuestos a exigir con firmeza las soluciones.