Aprobada la instalación en sierra Nevada del mayor radiotelescopio del mundo

La instalación en las cumbres de sierra Nevada de un radiotelescopio con antena parabólica de treinta metros de diámetro y quinientas toneladas de peso, que entraría en funcionamiento a partir de 1982 y sería la mayor del mundo en su género, ha sido definitivamente aprobada por las autoridades locales y provinciales de Granada con el visto bueno de la Junta de Andalucía.

El radiotelescopio no se instalará en el pico Veleta, como en un principio se había dispuesto, sino en la «loma de Dílar», a 2.850 metros de altitud y en un lugar relativamente «escondido».

El radiotelescopio...

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La instalación en las cumbres de sierra Nevada de un radiotelescopio con antena parabólica de treinta metros de diámetro y quinientas toneladas de peso, que entraría en funcionamiento a partir de 1982 y sería la mayor del mundo en su género, ha sido definitivamente aprobada por las autoridades locales y provinciales de Granada con el visto bueno de la Junta de Andalucía.

El radiotelescopio no se instalará en el pico Veleta, como en un principio se había dispuesto, sino en la «loma de Dílar», a 2.850 metros de altitud y en un lugar relativamente «escondido».

El radiotelescopio será instalado por la sociedad científica francoalemana IRAM, dedicada al estudio y desarrollo de la radioastronomía en microondas, que hace sus exploraciones mediante la captación de las radiaciones de la materia interespacial. El proyecto cuenta con una aportación técnica y financiera mayoritaria del Instituto Alemán de Investigaciones Max Plank, de Bonn, y en su realización colaborarán, asimismo, el Instituto Geográfico Nacional de España, el Instituto Astronómico Andaluz, la Universidad de Granada y del Ayuntamiento de esta ciudad, propietario de los terrenos de la sierra.

Según el director del IRAM (Instituto de Radioastronomía Milimétrica), con el radiotelescopio de sierra Nevada se podrán captar las microondas de origen natural procedentes de cualquier lugar de nuestra galaxia, así como las características de las moléculas interestelares y las llamadas «radiaciones isotrópicas», que pueden venir de direcciones diversas y con cuyos estudios «se podrá conocer mucho más sobre el origen del Universo y los millones de siglos que nos separan de su comienzo».

La estación podrá ser utilizada por todos los científicos del mundo.

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