La nueva baja récord del dólar crea tensiones entre las monedas de la serpiente europea

El dólar alcanzó ayer un nuevo récord de baja en casi todos los centros financieros europeos. La caída de la divisa de Estados Unidos animó, en contrapartida, la subida del precio del oro, que llegó a 227,20 dólares/onza en el mercado de Londres.Por su parte, las divisas de los países de la CEE que flotan concertadamente en el interior de la serpiente monetaria (marco, franco belga-luxemburgués, florín y corona danesa) experimentaron gran tensión. El Banco Central de Bélgica, en concreto, debía subir sus índices de crédito y, por vez primera en muchos años, solicitar créditos exteri...

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El dólar alcanzó ayer un nuevo récord de baja en casi todos los centros financieros europeos. La caída de la divisa de Estados Unidos animó, en contrapartida, la subida del precio del oro, que llegó a 227,20 dólares/onza en el mercado de Londres.Por su parte, las divisas de los países de la CEE que flotan concertadamente en el interior de la serpiente monetaria (marco, franco belga-luxemburgués, florín y corona danesa) experimentaron gran tensión. El Banco Central de Bélgica, en concreto, debía subir sus índices de crédito y, por vez primera en muchos años, solicitar créditos exteriores para sostener el mantenimiento del franco belga dentro de la zona de flotación del 2,25% de la serpiente.

Según medios monetarios de la CEE es probable que el dólar continúe su baja. Algunos interpretan que puede tratarse de una operación de contraataque contra el proyecto de creación de un sistema monetario europeo, destinado a reforzar la cohesión de las monedas de los países del Mercado Común y crear el embrión para un futuro Fondo Monetario Europeo. Los ministros de finanzas de la CEE continuarán los preparativos del programa monetario de la CEE en su próxima sesión del lunes 16 de este mes, en Luxemburgo. Paralelamente se preparan, al más alto nivel, reuniones entre jefes de Estado y primeros ministros de la Europa comunitaria para definir un programa -cuyas orientaciones se aprobaron en la última cumbre europea de Bremen, en julio pasado- que sea operacional a partir del 1 de enero de 1979. El encuentro entre el premier británico, James Callaghan, contrario a la vinculación de Gran Bretaña al sistema monetario europeo, y el canciller alemán, Helmut Schmidt, la semana próxima en Bonn, retiene la atención de los observadores.

Otra de las interpretaciones a la baja del dólar se funda en las últimas declaraciones de James Schlesinger, secretario norteamericano de la Energía, aludiendo a las dificultades que encontrarán Estados Unidos en reducir sus importaciones de petróleo, antes de 1985. Los europeos temen que la depreciación constante del dólar, moneda en la que continúan calculándose los precios del petróleo, origine una fuerte subida del precio del crudo, a finales de este año.

La política de los responsables comunitarios en el sector energético se orienta, a falta de poder evitar una subida de precio, hacia la cooperación a todos los niveles con los países productores de petróleo. En la jornada de ayer en Bruselas, Guido Brunner, comisario de la CEE responsable de la energía, recibió al Cheikh Ali Khalifa al-Sabah, presidente de la Organización Arabe de Países Exportadores de Petróleo (OAPEP) para tratar de la problemática general de la poética energética europea.

La baja del dólar -con sus consecuencias contrarias rara la exportación europea y mejora de competitividad de los productos norteamericanos importados a la CEE- junto con la perspectiva de incremento del precio de productos energéticos, son dos factores que pueden hipotecar la débil reactivación económica que empieza a vivir la Europa comunitaria estos últimos meses.

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