El anteproyecto ministerial no propone una auténtica autonomía universitaria

El anteproyecto de ley de autonomía universitaria elaborado por el equipo de Educación y Ciencia responde principalmente a unos objetivos de mera descentralización y no de consecución de una auténtica autonomía universitaria. Tal es la conclusión definitiva a la que han llegado, en Córdoba, un grupo de universidades (las tres de Cataluña, la Autónoma y la Complutense de Madrid, la Politécnica de Valencia y las de Córdoba, Baleares, Granada y Sevilla) y los partidos parlamentarios, con la excepción de UCD y AP.El mismo hecho de la celebración de este «encuentro de Córdoba» de alguna forma h...

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El anteproyecto de ley de autonomía universitaria elaborado por el equipo de Educación y Ciencia responde principalmente a unos objetivos de mera descentralización y no de consecución de una auténtica autonomía universitaria. Tal es la conclusión definitiva a la que han llegado, en Córdoba, un grupo de universidades (las tres de Cataluña, la Autónoma y la Complutense de Madrid, la Politécnica de Valencia y las de Córdoba, Baleares, Granada y Sevilla) y los partidos parlamentarios, con la excepción de UCD y AP.El mismo hecho de la celebración de este «encuentro de Córdoba» de alguna forma hay que interpretarlo dentro de una estrategia de más trascendencia que el de una simple alternativa al anteproyecto de UCD para la ley de Autonomía Universitaria. Por lo oído entre pasillos, no sería demasiado aventurado considerarlo como avanzadilla de la ruptura consensual subsiguiente al debate constitucional y una definición de posturas, especialmente por parte del PSOE hacia una estrategia de identidad de su propia imagen como partido de la oposición. La presencia de Trías Fargas hace suponer el fracaso momentáneo de la operación de convergencia intentada por UCD o al menos un elemento de presión hacia la disolución de la UCD catalana como condición sine qua non para aceptar entrar en una futura remodelación ministerial. El PNV y la propia Universidad catalana, limitando más su presencia a los niveles universitarios, han insistido en sus exigencias de una auténtica autonomía estamental.

De cualquier forma, estas impresiones de pasillos no se contienen en la declaración colectiva suscrita por todos los presentes; además de las citadas universidades, durante estos tres días estuvieron presentes Convergencia Democrática de Catalunya, Partido Comunista de España, Partido Nacionalista Vasco, Partit dels Socialistes de Catalunya, Partido Socialista Obrero Español, Partit Socialista Unificat de Catalunya y Partido del Trabajo de España. Cinco parlamentarios entre los firmantes: Íñigo Aguirre, Alfonso, Lazo, María Izquierdo, Javier Solanas y el citado Ramón Trías Fargas. Por el PCE concurrieron Triana, Cordero, Malo y Astasio; por el PSUC, Ribó; por el PSC, Marta Mata; por el PTE, Isidoro Moreno; por el PSOE, Félix de la Fuente, Solana, Mayoral, Lazo, Carmina Virgili, María Izquierdo, Joaquín Arango, Álvaro Esquina, Ramón Vargas, Rosa Cuevas y Diego Alonso. Seis rectores: Antoni Badía, Josep Laporte, Gabriel Ferraté, Saturnino de la Plaza, Pedro Martínez y Alberto Losada.

En el comunicado oficial se dice que los partidos políticos participantes consideran el seminario en sí, el trabajo en él producido y los textos elaborados como una aportación decisiva.

El seminario ha considerado con especial atención las soluciones contenidas en el anteproyecto del Ministerio de Educación y Ciencia actualmente en curso y recientemente presentado ante el Consejo Nacional de Educación y el Consejo de Rectores. En este punto, y sin perjuicio del enjuiciamiento de los contenidos concretos, el seminario estima que debe hacer pública su postura crítica al anteproyecto, fundamentada tanto en la concepción global del texto como en la filosofía en él subyacente y en el detalle de su articulado.

El seminario considera grave el hecho de que el anteproyecto no constituye propiamente una ley de autonomía universitaria, dado que regula con excesiva minuciosidad múltiples aspectos del normal funcionamiento de la institución universitaria, y entiende que esta autonomía, dentro de las posibilidades y límites que una ley o cuerpo legislativo con carácter marco, tendría que realizarse bajo la iniciativa y responsabilidad de cada Universidad. Considera asimismo grave el hecho de que el contenido dado al anteproyecto condiciona el ejercicio, según el proyecto constitucional, de las futuras competencias de las comunidades autónomas sobre estas materias.

En la presente circunstancia, termina diciendo el comunicado, el seminario ha examinado los criterios básicos que abren la posibilidad de implantación y funcionamiento de una real autonomía universitaria y, asimismo, posibles soluciones legislativas urgentes a algunos problemas de especial entidad, en particular la situación del profesorado y la democratización de los órganos de gobierno de la institución universitaria.

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