Lafuente Ferrari cierra su ciclo sobre Goya

Enrique Lafuente Ferrari, catedrático de Historia del Arte de la Escuela Superior de Bellas Artes de Madrid y académico de número de la Real de Bellas Artes, pronunció en la Fundación Juan March la última conferencia de su ciclo de cuatro lecciones sobre los dibujos de Goya. En intervenciones anteriores, analizó las etapas de la reacción absolutista de Fernando VII, el trienio constitucional y la restauración de la represión, hasta la muerte de Goya.El conferenciante señaló que «pocos artistas han dejado una labor tan íntima y extensa de dibujos como Goya y han expresado como él su propia filo...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Enrique Lafuente Ferrari, catedrático de Historia del Arte de la Escuela Superior de Bellas Artes de Madrid y académico de número de la Real de Bellas Artes, pronunció en la Fundación Juan March la última conferencia de su ciclo de cuatro lecciones sobre los dibujos de Goya. En intervenciones anteriores, analizó las etapas de la reacción absolutista de Fernando VII, el trienio constitucional y la restauración de la represión, hasta la muerte de Goya.El conferenciante señaló que «pocos artistas han dejado una labor tan íntima y extensa de dibujos como Goya y han expresado como él su propia filosofía, sus convicciones humanas, su odio a la estupidez y a la crueldad». «Los excesos de la reacción fernandina, con la persecución de liberales y sospechosos, inspiran a Goya una densa producción que es como la íntima protesta de su espíritu contra aquellos horrores: cárceles, torturas, condenas a muerte, reos agarrotados, víctimas de la Inquisición, constituyen los temas que obsesionan al artista y que recoge en un diario íntimo que guarda en secreto.»

De la última etapa de la vida de Goya, comentó el profesor Lafuente la serie de Los disparates, veintidós planchas de grabados que se publicaron en 1864 con el nombre de Proverbios. «Son imágenes sombrías de formas distorsionadas, el paralelo en el grabado de las pinturas negras. Sus temas son la paráfrisis de los motivos que ya había empleado Goya en sus series anteriores de Los caprichos y La tauromaquia.»

Goya descubre la litografía en 1819, que cultiva desde su estancia en París. Tras realizar las cuatro famosas láminas de los toros de Burdeos, Goya vuelve enfermo a Madrid; una nueva recaída en Burdeos, donde pinta la famosa Lechera de Burdeos, le conduce a la muerte.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En