Crítica:CINE

Entre el amor y la muerte

«En el teatro y sobre todo en el cine, es mucho más divertido trabajar con mujeres, es más fácil y resulta más interesante. En el trabajo son más instintivas y como en el cine todo se debe hacer muy rápidamente, resulta más; agradable trabajar con ellas... No creo que como seres humanos sean más interesantes que los; hombres. Quizá lo fueran hace años, pero hoy no veo tal diferencia. Yo planteo nuestros problemas a un nivel general.»A pesar de tales afirmaciones, los filmes de Bergman aparecen llenos de heroínas cuya personalildad suele borrar a sus oponentes masculinos relegándolos a cometido...

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«En el teatro y sobre todo en el cine, es mucho más divertido trabajar con mujeres, es más fácil y resulta más interesante. En el trabajo son más instintivas y como en el cine todo se debe hacer muy rápidamente, resulta más; agradable trabajar con ellas... No creo que como seres humanos sean más interesantes que los; hombres. Quizá lo fueran hace años, pero hoy no veo tal diferencia. Yo planteo nuestros problemas a un nivel general.»A pesar de tales afirmaciones, los filmes de Bergman aparecen llenos de heroínas cuya personalildad suele borrar a sus oponentes masculinos relegándolos a cometidos secundarios. Entre ellas, las interpretadas por Liv Ullmann destacan en sus últimas películas. No en balde el realizador la define así: «Es una mujer que me fascina terriblemente. Como actriz, ejerce sobre mí un enorme poder de sugestión. Su rostro refleja diversos personajes a la vez. Puede interpretar mil papeles diferentes. Además, personalmente, me gusta mucho, aunque esa es otra historia ... »Fruto y a la vez consecuencia de tal admiración es esta Face to face candidata al Oscar y broche final que cierra una de las más brillantes trilogías de la historia del cine actual, iniciada con Gritos y susurros y ampliada más tarde con Escenas de un matrimonio. Quizás en la historia de esta joven psiquiatra agotada y cohibida, lejos de la hija y del marido, algo resulte más forzado que en los filmes anteriores, en sus sueños y relaciones familiares, en su amor por el médico que a la postre resultará homosexual, en el intento de violación, en tales experiencias sufridas en tan poco tiempo. Quizás todas sus crisis, tantos pasos en falso vengan a destruirse a la postre, se evidencien pretextos para este recital Bergman-Ullmann, pero de todos modos, cierto tipo de mujeres se reconocerán en la protagonista, en su peripecia, más allá del amor y de la muerte.

Cara a cara

Argumento, guión, diálogos: Ingmar Bergman. Fotografía Aven Nykvist. Música, «Fantasía en re menor» de Mozart. Dirección, Ingmar Bergman. Intérpretes, Liv Ullmann, Erland Josephson, Gunnar Njornstrand, Aino Taube, Kary Sylwan, Suecia. Drama. 1976. Local de estreno: Cine Azul.

Esta búsqueda del amor como salvación, más allá y más acá de lo consciente, un a vez perdida la fe en el Dios de los cristianos y en las ciencias modernas de la mente, viene a encontrar refugio y solución en el amor de los ancianos indiferente a la muerte, en una especie de fatalismo resignado, lejos de los recuerdos de la infancia y de la angustia del tiempo presente.

Realizada para la televisión, esta autoconfesión de Bergman en la que la palabra prima sobre la imagen, propone un análisis de causas dentro de una temática que no resultará novedad para los seguidores de Bergman.

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