El largo verano de la Filmoteca

Esta semana cierra el curso la Filmoteca Nacional, que se toma tres largos meses de vacaciones. Con ese motivo, y para una mejor planificación del próximo curso, los organizadores de la Filmoteca han lanzado una encuesta a ese público especializado e interesado, en la que se traslucen todos los problemas del cine no estrictamente comercial en España. Por un lado, los de proyección y conservación de las películas, que muchas veces vienen en pésimo estado; los derivados de los distintos lenguajes: subtitulación, doblajes, etc. El eterno problema del local en que se sitúa la Filmote...

Esta semana cierra el curso la Filmoteca Nacional, que se toma tres largos meses de vacaciones. Con ese motivo, y para una mejor planificación del próximo curso, los organizadores de la Filmoteca han lanzado una encuesta a ese público especializado e interesado, en la que se traslucen todos los problemas del cine no estrictamente comercial en España. Por un lado, los de proyección y conservación de las películas, que muchas veces vienen en pésimo estado; los derivados de los distintos lenguajes: subtitulación, doblajes, etc. El eterno problema del local en que se sitúa la Filmoteca que, en Madrid, viene siendo volante.Estos malestares, que son endémicos en el cine no comercial español, se han visto acentuados este año por una perplejidad nueva: se rumoreaba que para cerrar el curso, se había traído, en plan plato fuerte, Cuentos inmorales de Valerian Browicz. Y al parecer, esta película y La Bestia, del mismo director, han sido proyectadas a la censura, en el Ministerio, y éstos han prohibido su proyección, ni siquiera por una sesión, como fue el caso, hace pocos días de Masculi-Feminine, de Godard, a la que se suprimió un segundo pase.