Protesta popular en Vizcaya contra las centrales nucleares

Las centrales nucleares son tema polémico en el País Vasco. No hace todavía muchas semanas la Diputación de Guipúzcoa se manifestaba en contra de la que Iberduero pretende construir en el término municipal de Deva, basando su decisión en las conclusiones de un informe técnico, encargado al equipo Dames and Moore, con un presupuesto de ejecución de seis millones de pesetas.

Este informe ha servido para que en Vizcaya se desate también una campaña popular contra la central nuclear que Iberduero pretende instalar en Ispaster-Ea y la que está construyendo en Lemoniz.La campaña ha sido inici...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Las centrales nucleares son tema polémico en el País Vasco. No hace todavía muchas semanas la Diputación de Guipúzcoa se manifestaba en contra de la que Iberduero pretende construir en el término municipal de Deva, basando su decisión en las conclusiones de un informe técnico, encargado al equipo Dames and Moore, con un presupuesto de ejecución de seis millones de pesetas.

Este informe ha servido para que en Vizcaya se desate también una campaña popular contra la central nuclear que Iberduero pretende instalar en Ispaster-Ea y la que está construyendo en Lemoniz.La campaña ha sido iniciativa de una recién constituida Comisión por Una Costa Vasca no Nuclear. Los escritos de oposición a estas dos centrales, comienzan a llegar a la Diputación de Vizcaya, en número que preocupa ya a algunos de sus representantes, puesto que la presión puede obligar a adoptar una postura que podría ir en contra de los fuertes intereses económicos en juego.

En esta campaña de oposición a las proyectadas centrales nucleares han adoptado ya postura el Colegio de Arquitectos, varios comités de colegios profesionales, gran número de médicos, las cofradías de pescadores, en pleno, la casi totalidad de las asociaciones y de vecinos, entidades culturales, una treintena de profesores de la Universidad y varias comunidades de propietarios.

A lo largo de un escrito de once folios llegan a la conclusión de que «las múltiples deficiencias desveladas por el informe de la Diputación guipuzcoana, se agravan considerablemente en el caso vizcaíno». Esto induce a constatar a los firmantes la poca confianza que les merecen las pretendidas garantías de seguridad en los proyectos de Ispaster-Ea y Lemoniz.

«Estos proyectos -añaden- supondrían, si se llevasen a cabo, un peligro constante para la salud y seguridad de la comunidad vizcaína, en primer término, y un atentado injustificable al planteamiento urbano y comarcal de esta provincia, tan escasa de suelo útil y con tan graves problemas de contaminación y deteriorización ambiental.»

Entre los motivos que se exponen para oponerse al proyecto de Lemoniz figura, entre otros, el hecho de que la comarca de Plencia-Munguía, está destinada a ser una de las zonas de expansión del gran Bilbao. Señalan asimismo que la cornisa que se ex tiende desde Plencia hasta Ondarroa «goza de unos valiosos recursos piscícolas, agrícolas y turísticos que suponen una valiosa reserva de espacios libres».

En base a las irregularidades cometidas durante la realización de ambos proyectos y de los peligros que conlleva la utilización de la actual tecnología nuclearse oponen a la instación de la central de Ispaster-Ea y piden la inmediata paralización de las obras de Lemoniz. Estiman que la inversión de varios miles de millones llevada a cabo por Iberduero, en esta última central, no deben ser obstáculo para que da comunidad afectada exija el riguroso cumplimiento de la ley y ejercite el derecho que le asiste para decidir sobre la conveniencia o no, de esas centrales nucleares».

En el caso de que la Diputación de Vizcaya se decida a efectuar por su cuenta un estudio en torno a este tema, piden que dichos trabajos se lleven a cabo bajo la supervisión y control permanentes de unos técnicos que designe la comunidad, técnicos que deberían ser remunerados, con cargo al presupuesto de la Diputación.

Informe de la Diputación de Guipúzcoa

Las conclusiones mencionadas se han extraído fundamentalmente de los datos manejados por el informe Dames and Moore que la Diputación de Guipúzcoa encargó, costeó e hizo suyo, por acuerdo plenario. En dicho informe se exponen doce críticas al proyecto de Iberduero:1. Contraindicación del emplazamiento de Deva, por excesiva concentración humana, actual y futura, en la zona».

2. Falta de un estudio profundo de emplazamientos alternativos.

3. Iberduero no realizó un estudio consistente de costes y beneficios.

4. Ausencia de un análisis regional que contemple las centrales nucleares dentro del contexto de la ordenación del territorio.

5. No hay un estudio del impacto conjunto de las tres centrales en la costa vasca y en la zona interior.

6. El plan de emergencia no se ha desarrollado suficientemente.

7. El sistema de refrigeración ha sido elegido en base a consideraciones de minimización de costos, sin tener en cuenta los daños que pudiera causar en la ecología marina.

8. Las características geológicas y sismológicas han planteado serios problemas en los emplazamientos elegidos. Los reconocimientos de Dames and Moore han puesto de manifiesto, la presencia de varios fallos no registrados en el informe de Iberduero.

9. Defectos en los estudios sobre hidrología y oceanografía.

10. No se ha resuelto el problema de almacenamiento de residuos radiactivos, tema en el que sólo existen propósitos.

11. No se ha demostrado que el emplazamiento elegido sea el mejor entre las varias alternativas.

12. En definitiva los puntos expuestos denotan, la falta de estudios suficientes para justificar la construcción de una central nuclear en el término municipal de Deva.

Estos argumentos, empleados por la Diputación de Guipúzcoa, han sido asimilados a los dos proyectos que afectan a la provincia de Vizcaya. Algunas de las situaciones denunciadas se agravan concretamente en el caso de Lemoniz, ya que en caso de emergencia podría llegar a afectar a los 800.000 habitantes que pueblan el Gran Bilbao. La falta de alternativas y estudios geológicos suficientes es aplicable igualmente a los proyectos vizcaínos.

Archivado En