“A ti te llevaría yo al campo…”, la respuesta en directo del ganadero Ricardo Gallardo a una reportera de Canal Sur

“A ti te llevaría yo al campo”, le espetó Ricardo Gallardo, ganadero de Fuente Ymbro, a la periodista de Canal Sur TV Noelia López cuando esta le preguntó si se llevaría al campo al toro que en ese momento estaba muleteando el diestro Esaú Fernández en la plaza sevillana de Utrera, entre el clamor de gran parte del público para que el animal fuera indultado.

La desafortunada frase del ganadero sorprendió a su interlocutora, quien respondió con una sonrisa forzada, al tiempo que Gallardo, sin conced...

“A ti te llevaría yo al campo”, le espetó Ricardo Gallardo, ganadero de Fuente Ymbro, a la periodista de Canal Sur TV Noelia López cuando esta le preguntó si se llevaría al campo al toro que en ese momento estaba muleteando el diestro Esaú Fernández en la plaza sevillana de Utrera, entre el clamor de gran parte del público para que el animal fuera indultado.

La desafortunada frase del ganadero sorprendió a su interlocutora, quien respondió con una sonrisa forzada, al tiempo que Gallardo, sin conceder mayor importancia a sus propias palabras, alabó la labor del torero y el trapío del toro.

Asimismo, los comentaristas del festejo, Enrique Romero, conductor de las retransmisiones taurinas de la cadena andaluza, y Francisco Ruiz Miguel, torero retirado, no prestaron atención a lo sucedido y continuaron con sus apreciaciones sobre lo que estaba acaeciendo en el ruedo.

Pero no fue ese el primer error del ganadero gaditano. Avanzada la faena de muleta de Esaú Fernández, cuando ya el toro había mostrado sus excelentes condiciones y el palco presidencial sopesaba la opinión de los tendidos, el ganadero, que llevaba largo rato apostado en un burladero, decidió salir al ruedo, y situarse junto a las tablas, sin que el delegado de la autoridad le recordase la prohibición reglamentaria de que ningún espectador puede pisar la arena durante la lidia.

Fue entonces cuando el periodista Enrique Romero, exultante al igual que Ruiz Miguel sobre el juego del toro, le dice a Noelia López: “Acércate a Ricardo a ver qué nos dice”. Al instante, la periodista toma la palabra y comenta: “Aquí estoy con Ricardo Gallardo, el ganadero, que está pendiente de la decisión del presidente sobre este gran toro”. Y, a continuación, le hace la pregunta que dio lugar al sorprendente comentario del ganadero.

Al final, el toro, el primero de la tarde, fue indultado y volvió vivo a los corrales, aunque el propio Gallardo, según comentó Noelia López, se había manifestado en contra, pero las redes sociales no tardaron en hacerse eco del incidente y censuraron la actitud del ganadero.

También fue objeto de numerosos comentarios el perdón concedido al toro de nombre Embriagado, de 557 kilos de peso y nacido en diciembre de 2018, que, al parecer, estuvo aprobado para la reciente feria de Bilbao. De enorme trapío, acudió con fijeza a un único puyazo, se desplazó con alegría en banderillas, y aguantó con la boca cerrada una larguísima faena de muleta en la que destacó por su acometividad, humillación, transmisión y, sobre todo, por su encastada nobleza. Esaú Fernández lo pasó por ambas manos en tandas largas en las que, sin duda, sobresalieron las extraordinarias condiciones del toro. Mediada la faena, parte del público se decantó por el indulto, petición que fue en aumento a medida que el torero hacía gestos de montar la espada para que arreciara la presión al presidente. Al final, tras sonar un aviso, y después de que el torero finalizara la undécima tanda a la que Embriagado acudió con renovada codicia, asomó el pañuelo naranja, que supuso el perdón para el toro de Fuente Ymbro.

El resto de la corrida, de imponente trapío todos los toros, aprobados varios de ellos en Pamplona y Bilbao, según los comentaristas, ofreció un juego desigual y puso a prueba a los integrantes del cartel, Borja Jiménez, Francisco de Manuel y el citado Esaú Fernández, que aprobaron con nota tan dificultoso examen.

Hubo poco público en los tendidos a causa de la pertinaz lluvia que cayó durante todo el día en Utrera, y el festejo pudo celebrarse gracias al eficaz trabajo de los operarios de la plaza, que consiguieron adecentar un ruedo completamente encharcado.

Al final, los tres toreros salieron a hombros. Fernández cortó las dos orejas y el rabo simbólicos del toro indultado y una oreja del cuarto; y una oreja en cada toro pasearon Borja Jiménez y Francisco de Manuel.