Bad Bunny afronta una demanda millonaria de su expareja por derechos de autor
Carliz de la Cruz pide a la estrella puertorriqueña una compensación de al menos 40 millones de dólares por usar una grabación suya en varios temas sin autorización
El cantante puertorriqueño Bad Bunny ha sido demandado en un tribunal de San Juan, capital de Puerto Rico, por su expareja Carliz de la Cruz, quien pide una compensación de al menos 40 millones de dólares por derechos de imagen, derechos morales de autor y daños y perjuicios. La demanda de De la Cruz, licenciada en derecho desde 2021, contra Benito Antonio Martínez Ocasio, nombre de pila de Bad Bunny, se debe a que el artista ha utiliz...
El cantante puertorriqueño Bad Bunny ha sido demandado en un tribunal de San Juan, capital de Puerto Rico, por su expareja Carliz de la Cruz, quien pide una compensación de al menos 40 millones de dólares por derechos de imagen, derechos morales de autor y daños y perjuicios. La demanda de De la Cruz, licenciada en derecho desde 2021, contra Benito Antonio Martínez Ocasio, nombre de pila de Bad Bunny, se debe a que el artista ha utilizado el estribillo “Bad Bunny baby” en varios temas sin su autorización.
De acuerdo con el documento legal, presentado el 1 de marzo en el Tribunal de Primera Instancia de San Juan, pero dado a conocer este lunes, en 2015 De la Cruz y Martínez Ocasio “decidieron que sería una idea cautivadora” que este, después de su nombre artístico, incluyera la palabra ‘baby”.
“Con la intención de que la frase ‘Bad Bunny baby’ fuese más original todavía, ambos tuvieron la idea que lo mejor es que se grabara con la voz de Carliz, su novia”, con quien inició una relación en 2011, antes de hacerse famoso, según detalla la demanda. Ese mismo año, mientras De la Cruz se encontraba en su entonces hospedaje, junto a una amiga, recibió una petición de parte del cantante para que se grabara diciendo “Bad Bunny baby”, algo que la joven hizo en su teléfono móvil.
Bad Bunny incluyó ese estribillo en el tema Pa’ ti (2017), donde también cantó Bryant Myers, y aparecía la voz de la joven “sin su consentimiento, ni autorización por escrito”, de acuerdo al documento judicial. Esta fue la primera canción que grabó Bad Bunny para el sello discográfico de Rimas Entertainment, con el que firmó en abril de 2016 y que también ha sido demandado por De La Cruz.