La fiscalía del Reino Unido acusa al actor Kevin Spacey de cuatro delitos de abuso sexual
Los cargos son el fruto de una larga investigación llevada a cabo por la Policía Metropolitana de Londres. Las presuntas víctimas son tres hombres
El Servicio de Fiscalía la Corona (CPS, Crown Prosecution Service) del Reino Unido ha anunciado este jueves su decisión de procesar por cuatro delitos de abuso sexual al actor estadounidense Kevin Spacey, de 62 años. Las presuntas víctimas serían tres varones. “Así mismo, también ha sido acusado de obligar a una persona a realizar una actividad sexual con penetración sin su consentimiento. Todos los cargos son el resultado de la revisión final de las pruebas recabadas por la Policía Metropolitana durante su investigación”, ha explicado Rosemary Ainslie, jefa de la División de Delitos Es...
El Servicio de Fiscalía la Corona (CPS, Crown Prosecution Service) del Reino Unido ha anunciado este jueves su decisión de procesar por cuatro delitos de abuso sexual al actor estadounidense Kevin Spacey, de 62 años. Las presuntas víctimas serían tres varones. “Así mismo, también ha sido acusado de obligar a una persona a realizar una actividad sexual con penetración sin su consentimiento. Todos los cargos son el resultado de la revisión final de las pruebas recabadas por la Policía Metropolitana durante su investigación”, ha explicado Rosemary Ainslie, jefa de la División de Delitos Especiales de Scotland Yard. Los supuestos abusos habrían ocurrido entre 2005 y 2013. Dos de ellos en Londres y uno en la localidad de Gloucestershire.
El comunicado de la CPS evita dar más detalles sobre Spacey, y recuerda que su función no es “decidir si alguien es culpable o inocente de un delito, sino aportar argumentos objetivos, justos e independientes sobre si resulta apropiado o no presentar una acusación para que sea un tribunal penal quien la considere”.
El teatro Old Vic de Londres, del que Spacey fue director artístico desde 2004 a 2015, pidió disculpas a los ciudadanos después de revelar que había recibido hasta veinte quejas contra el actor por comportamiento inadecuado. El diario tabloide The Sun publicó en septiembre de 2020 fotos de Spacey en bicicleta por las calles londinenses, con un anillo de casado. Era la primera vez que se dejaba ver públicamente en meses.
La estrella estadounidense, protagonista de películas legendarias como Glengary Glenn Ross, Sospechosos Habituales, L.A. Confidential, American Beauty o la serie House of Cards, reveló públicamente en 2017 que era gay, poco después de que el actor Antony Rapp le hubiera acusado de violarle cuando tenía 14 años, en 1986. Spacey tenía entonces 26. Al finalizar una fiesta, contó el actor de Star Trek Discovery a la página web de noticias Buzzfeed News, Spacey saltó a su cama e intentó abusar de él. Fue el caso Weinstein, y el movimiento que generó el MeToo, lo que animó a Rapp a dar el paso. A partir de esa primera acusación, hasta treinta hombres más aseguraron que habían sido víctimas de los abusos sexuales del actor.
Durante los últimos años, algunos de los procesos contra Spacey han finalizado con sobreseimiento, por prescripción de los delitos o porque las partes acusadoras o la fiscalía decidieron retirar los cargos. A través de demandas en la jurisdicción civil, sin embargo, el actor ha tenido que pagar indemnizaciones por valor de varias decenas de millones de dólares. El 17 de julio de 2019 se cerró el último proceso penal contra Spacey, cuando el masajista anónimo que le acusaba de abusos sexuales, falleció.
La carrera del actor ha quedado prácticamente truncada a partir de todos estos escándalos. Spacey, además de ser considerado en su momento uno de los mejores intérpretes de su generación, fue un intenso activista político que apoyaba las causas de la izquierda estadounidense. Amigo personal del ex presidente Bill Clinton, llegó a definir al político como un “faro de la democracia”.
La respuesta de Spacey a una industria que decidió darle la espalda tuvo dos fases. Una primera de contrición en la que pidió perdón por todo lo sucedido y abrazó su condición de homosexual, aunque negó hasta el final todas las acusaciones. Y una segunda de desafío, después de que se suspendiera la grabación de la sexta y última temporada de House of Cards y se eliminara toda presencia de Spacey en las promociones. En las navidades de 2018 lanzó un video en YouTube en el que resucitaba al maquiavélico político de la serie, Frank Underwood. Let Me Be Frank. Dejadme ser Frank, o Dejadme ser Sincero, en un juego de palabras provocador. Sin decirlo claramente, Spacey jugó con una serie de frases en las que parecía cuestionar todas las acusaciones de los últimos años. “Les encantaría escucharme decir que todo fue verdad y que tengo lo que merezco. Qué fácil sería si todo fuera tan simple. Pero tú y yo sabemos que nunca es tan simple, ni en política ni en la vida real”, dice el actor. 13 millones de personas han visto el video hasta la fecha.
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