Caminito amigo
Estudio de D. Gurgenidze
Tiny Endgame, 1999
Si usted jugase con blancas en la posición del diagrama y encontrara la estrechísima vía que permite hacer tablas, saldría después de la sala entonando Caminito con la pasión de Carlos Gardel, y deseando bailar un tango o lo que se terciara. Como en todo final artístico de gran calidad, el objetivo parece imposible, porque el plan negro es muy claro: acercar el corcel hasta dar un jaque doble que elimine el peón blanco, y luego coronar el propio. Ciertamente, seis de las siete jugadas disponibles del m...
Estudio de D. Gurgenidze
Tiny Endgame, 1999
Si usted jugase con blancas en la posición del diagrama y encontrara la estrechísima vía que permite hacer tablas, saldría después de la sala entonando Caminito con la pasión de Carlos Gardel, y deseando bailar un tango o lo que se terciara. Como en todo final artístico de gran calidad, el objetivo parece imposible, porque el plan negro es muy claro: acercar el corcel hasta dar un jaque doble que elimine el peón blanco, y luego coronar el propio. Ciertamente, seis de las siete jugadas disponibles del monarca defensor conducen al patíbulo. Pero hay una, sólo una, la del caminito amigo, que persuadirá al lector de que incluso en las posiciones desesperadas conviene buscar algún detalle excepcional: 1 Ra8!! (conviene repasar cuidadosamente todas las demás posibilidades para entender perfectamente este tipo de posiciones: A) 1 Rc8? Cc4 2 b7 Cd6+; B) 1 Rc7? Ca4 2 b7 Cc5 3 b8=D Ca6+; C) 1 Rc6? Cc4 2 b7 Ca5+; D) 1 Ra7? Cc4 2 b7 Ca5 3 b8=D Cc6+; E) 1 Ra6? Ca4 2 b7 Cc5+) 1 ..Cc4 (tras 1 ..Ca4 2 b7 d2 3 b8=D d1=D, la ventaja negra de material no sería suficiente para ganar) 2 b7 Cb6+ 3 Rb8 (si 3 Ra7 Cd7, y ganan las negras) 3 ..Cd7+ 4 Rc8! (y no 4 Rc7? por 4 ..Cc5! 5 b8=D Ca6+, ganando) 4 ..d2 5 Rxd7 d1=D+ 6 Rc7!, y tablas. Si el rey negro estuviera en cualquier otra casilla, excepto c3 y c4, la dama negra daría jaques hasta obligar al rey blanco a ir a b8; entonces el rey negro se acercaría un paso hacia el peón, y se repetiría la historia hasta el mate. Pero como en la posición actual no hay jaques, el empate es inevitable. Correspondencia: ajedrez@elpais.es