El vídeo doméstico 'okupa' un piso en el centro de Barcelona

El festival Loop reúne el arte más emergente de la mano de la Sala d'Art Jove

Un piso que llevaba años sin alquilarse -el olor a cerrado no engaña- aglutina las obras más emergentes del VIII Festival Loop, donde casi mil vídeos de 754 artistas ocupan diferentes espacios de Barcelona. En el caso de Treballs Forçats, 11 artistas han ocupado el principal de un piso de la céntrica calle Canuda. "Todo surgió de forma improvisada, nos ofrecieron la posibilidad de realizar una muestra dentro del festival y como que ya teníamos programación para nuestra sala, se nos ocurrió la idea de un habilitar un piso", explica Oriol Fontdevila, comisario de esta exposición organizad...

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Un piso que llevaba años sin alquilarse -el olor a cerrado no engaña- aglutina las obras más emergentes del VIII Festival Loop, donde casi mil vídeos de 754 artistas ocupan diferentes espacios de Barcelona. En el caso de Treballs Forçats, 11 artistas han ocupado el principal de un piso de la céntrica calle Canuda. "Todo surgió de forma improvisada, nos ofrecieron la posibilidad de realizar una muestra dentro del festival y como que ya teníamos programación para nuestra sala, se nos ocurrió la idea de un habilitar un piso", explica Oriol Fontdevila, comisario de esta exposición organizada por la Sala d'Art Jove.

Son todos artistas -la mayoría catalanes- que han expuesto antes en la Sala d'Art Jove y tienen una característica común: no se dedican al vídeo pero lo usan como una herramienta más de expresión artística. Ya sea para provocar, explicar, reflexionar o debatir. Según el comisario de la exposición, Oriol Fontdevila, Trabajos Forzados responde a dos aspectos clave: la presencia cada vez más habitual del video en el formato de lo doméstico y el debate de si el tiempo de producción videográfica se puede considerar como un tiempo libre.

En uno de los vídeos, realizado por Raquel Friera, un actor interpreta durante ocho horas lo que es perder el tiempo a partir de las respuestas de cien ciudadanos de Barcelona. Sleepers, de Miquel García, es una grabación de tres minutos de pasajeros durmiendo en el metro de Seúl, que alberga una de las redes más extensas de este medio de transporte, 287 kilómetros.

"La mayoría de artistas no se han formado en el ámbito del vídeo, pero lo usan", explica Oriol Fontdevila, para quién el concepto de videoarte está desfasado. "No es un género en si. Como ocurre en una página web, el vídeo es una herramienta más". Algunos son actores, otros artistas plásticos. Daniela Ortiz, por ejemplo, presenta Espacio Privado, una aproximación a la realización de películas pornográficas donde se analiza una de las localizaciones donde se grabó Juegos de parejas, película en cuya producción participó la artista.

Otra obra, de Alba Mayol y Álvaro Ramírez, es una grabación de un hombre disfrazado de caballo que irrumpe en la tradicional fiesta de los Tres Tombs del pueblo de Perafita (Osona), dedicada a todo lo que rodea el mundo de los caballos. "La misma persona que ha hecho este vídeo presentaba la semana pasada una obra de teatro en Fabra i Coats", añade Fontdevila.

El piso estará abierto de forma gratuita al público hasta el 22 de mayo, con un horario que varía según el día.

MARCEL·LÍ SÀENZ
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