Chile confirma la muerte de Loren Garcovich, desaparecida desde el ataque de Hamás en Israel

El Gobierno de Chile, a través de su ministerio de Relaciones Exteriores, ha confirmado la muerte de Loren Garcovich, chilena-israelí de 47 años que se creía capturada el 7 de octubre junto a su esposo español, Iván Illarramendi, en un kibutz próximo a la Franja. “Estamos al tanto de la muerte de Loren Garcovich, porque hemos mantenido contacto con su padre a través de nuestro consulado en Tel Aviv”, ha asegurado la Cancillería liderada por Alberto van Klaveren. Como la información fue dada a conocer en España, el ministerio chileno ha explicado que el padre de la víctima, Danny Garcovich, “pidió expresamente reserva sobre esto”. “Hemos respetado la voluntad de la familia, pero dado que en España trascendió la noticia sobre la muerte de la pareja, nos vemos en la triste necesidad de confirmar el fallecimiento de Loren”.

El Gobierno chileno condenó el ataque: “Su asesinato en manos de terroristas de Hamas merece nuestra más absoluta condena”, se ha asegurado desde la Cancillería chilena. De acuerdo a la información que maneja el Gobierno chileno, no habría alcanzado a ser secuestrada, lo que será materia de investigación de las autoridades israelíes.

La chilena y el español fueron quemados vivos juntos en su casa en un kibutz cerca de Gaza en el ataque de Hamás el pasado 7 de octubre, informa a la agencia EFE un portavoz del Ministerio de Exteriores israelí, que precisó que los restos de la pareja serán enterrados en Israel y en España. La identificación concluyó este martes tras un complicado proceso en el Instituto de Medicina Forense de Abu Kabir, en Tel Aviv. En uno de los dos centros forenses en los que se analizan desde hace varias semanas los restos de personas asesinadas durante el ataque.

Van Klaveren ha hablado con Danny Garcovich, el padre de Loren, “para entregar las condolencias del Gobierno de Chile por la muerte de su hija y yerno, Ivan Illaramendi”. “Exigimos el fin de la violencia y condenamos el asesinato de nuestra compatriota y su pareja en manos de terroristas de Hamás”, escribió el ministro chileno. “El trabajo de nuestra Cancillería sigue enfocado en asistir a las chilenas y chilenos que se encuentran en la zona. Sobre todo en la liberación de otra víctima de origen chileno, Mía Schramm, quien fue secuestrada por los terroristas de Hamás”, agregó el canciller de Boric.

El pasado 17 de octubre, el Gobierno israelí incluyó al vasco y la chilena entre los 200 ciudadanos de 42 nacionalidades secuestrados por Hamás. El presidente del Gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, exigió ese día la “liberación inmediata de todos los rehenes” en manos de la milicia islamista, citando expresamente a su “conciudadano” español.

El Gobierno de Chile también consideró a Loren Garcovich e Iván Illarramendi entre los rehenes de Hamás. El Ejecutivo chileno fue el primero en dar la noticia, la noche del 9 de octubre, en la voz del canciller de Boric, quien confirmó en su cuenta de X (antes Twitter) que Loren Garcovich fue “secuestrada por terroristas en la zona de conflicto” y contó que se comunicó con Danny Garcovich: “Admirable la templanza y claridad en sus palabras. Le expresé nuestra preocupación y solidaridad ante la situación. No cejaremos en apoyar su búsqueda y retorno”, señaló Van Klaveren entonces.

Este miércoles, la embajadora de Israel en España, Rodica Radian-Gordon, en la red social X (antigua Twitter), escribió: “Nuestros corazones están desgarrados por la noticia del brutal asesinato de Iván Illarramendi. Ha sido identificado un mes después de la masacre terrorista cometida por Hamás en Israel, junto a su esposa Dafna Garcovich”.

El padre de la víctima relató a EL PAÍS hace algunas semanas que la familia reside en Israel desde 1984, cuando su hija –nacida en la localidad chilena de San Felipe– tenía ocho años. El 7 de octubre pasado, el kibutz donde vivía su hija y su yerno, Kisufim, fue asaltado por la milicia islamista Hamás. En medio de los misiles, Iván y Dafna se ocultaron en el refugio de su casa; lo mismo hicieron sus padres en la suya, pocos metros más allá. Danny Garcovich recordaba que, mientras oían los misiles, hablaron por teléfono; que su hija le iba relatando cómo sentía que entraban a su casa, que escuchaba gritos y voces en árabe y que, a medida que transcurría el tiempo, y cuando ya sabía que estaban dentro, comenzó a hablar en voz baja para que no la oyeran.

“Lo último que la escuché decir fue ‘auxilio, socorro, auxilio”, relató Garcovich. Eran las 12.30 del mediodía. Luego se cortó la comunicación, pues las antenas de los teléfonos móviles fueron derribadas.

Danny Garcovich, que vive junto a su esposa a metros de donde vivía Loren, no volvió a saber ni de su hija ni de su yerno.

El hombre daba a la pareja como desaparecida, no como secuestrada. “No tenemos ninguna información de dónde están”. Para él, su situación era de desaparecidos mientras no existiera una lista de la Cruz Roja Internacional que señalara que están secuestrados. “Por el momento no tenemos información de quiénes están y quiénes no están, fuera de dos o tres grabaciones que ellos [Hamás] hicieron para mostrar a una o dos personas. A ellas podemos catalogarlas como secuestradas; de las demás no hay ningún rastro, ninguna idea, y tampoco hay forma de verificar cuál es el estado en el que están”, dijo Garcovich a este periódico el 20 de octubre pasado. Confesaba sentir “angustia” por lo que estaba pasando. “Mientras no sepamos cuál es la realidad, domina la incertidumbre. Y la incertidumbre es mucho peor que saber la realidad, así sea feliz o triste. De eso estamos totalmente convencidos”, aseguraba hace unas semanas.

La Cancillería chilena ha estado en permanente contacto con la familia desde que se conoció la desaparición de Loren y, según se ha reconocido hoy desde el ministerio, cuando se ha confirmado la noticia de su asesinato, compartían “la esperanza de que aún estuviera con vida”.