Ocho calles de Santiago de Chile cambian su nombre en homenaje a víctimas de la dictadura de Pinochet

En la sesión del concejo municipal de la la Municipalidad de Santiago de este miércoles, compuesto por 10 integrantes y presidido por la alcaldesa Irací Hassler, del Partido Comunista, PC, se ha aprobado una propuesta para modificar el nombre de ocho calles, dos plazoletas y el puente Loreto en homenaje a las víctimas de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990). La iniciativa, que no genera consenso entre los habitantes ni entre especialistas, se ha aprobado con nueve votos a favor y dos en contra.

El concejo municipal de la comuna de Santiago está integrado por tres concejalas del PC, tres del Frente Amplio, la coalición original del presidente Gabriel Boric, dos independientes y dos de Revocación Nacional, RN, de la derecha tradicional. Estos últimos, Juan Mena y Santiago Mekis, fueron los únicos que rechazaron la iniciativa.

Los cambios de nombre, que fueron solicitados por distintas organizaciones, se enmarcan en la agenda de la Municipalidad de Santiago por la conmemoración del medio siglo del golpe de Estado de 1973. “Este ejercicio de memoria es un ejercicio de democracia”, dijo la alcaldesa Hassler en la sesión de hoy. La autoridad agregó: “Este momento reviste un carácter histórico, por eso ha causado debate en nuestro país y comuna”.

La propuesta contempla modificar el nombre de algunos tramos de las calles Santa Mónica, Maule, Delfina, Aconcagua, General Bulnes, Huérfanos, Rosas, Manuel de Amat, además de dos plazoletas y el Puente Loreto.

En un principio también se incluía la calle Namur. Esta mañana, sin embargo, el Colegio de Arquitectos modificó su solicitud de cambiar el nombre de esta calle. A través de conversaciones con residentes -quienes protestaron esta mañana ante el posible cambio-, decidieron finalmente que se propondrá que la plazoleta ubicada en Merced con Monjitas lleve el nombre de Amelia Vera Almarza, arquitecta y militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR) detenida desaparecida en 1974. Hassler mencionó que esa iniciativa se votará en otra instancia.

En un comunicado dado a conocer este miércoles, el municipio puntualizó que los residentes de estas calles no deberán realizar pago alguno. Tampoco realizar ningún trámite, ya que la propia municipalidad se encargará de informar directamente a las instituciones de las modificaciones en la numeración.

La portavoz y vicepresidenta del comité a cargo de organizar las actividades del municipio por el aniversario del golpe, Dafne Concha, indica que los cambios deberían concretarse antes del 10 de diciembre de este año, en el Día Internacional de los Derechos Humanos.

La agenda en torno a la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado en Chile ha presentado dificultades. A principios de julio debió renunciar el asesor presidencial para la conmemoración, el escritor Patricio Fernández, tras ser acusado por 162 organizaciones de derechos humanos y agrupaciones de familiares de víctimas de haber relativizado el golpe que puso fin a la Administración del socialista Salvador Allende (1970-1973), lo que generó una fuerte controversia al interior de la izquierda.