El déficit del sector público sube al 1,2% del PIB hasta noviembre
El gasto de la Generalitat se reduce el 2,6% respecto a 2012
El sector público catalán cerró el mes de noviembre con un déficit no financiero de 2.116,6 millones de euros, equivalente a alrededor del 1,2% del Producto Interior Bruto (PIB). La cifra es todavía algo inferior al 1,58% del PIB que el Consejo de Política Fiscal y Financiera fijó como tope para la Generalitat este año. No obstante, es también lo suficientemente elevada para confirmar que el Ejecutivo de Artur Mas, como ha admitido el consejero Andreu Mas-Colell, se aleja del cumplimiento de la meta marcada para 2013.
El Gobierno catalán ha relajado la tijera respecto al primer...
El sector público catalán cerró el mes de noviembre con un déficit no financiero de 2.116,6 millones de euros, equivalente a alrededor del 1,2% del Producto Interior Bruto (PIB). La cifra es todavía algo inferior al 1,58% del PIB que el Consejo de Política Fiscal y Financiera fijó como tope para la Generalitat este año. No obstante, es también lo suficientemente elevada para confirmar que el Ejecutivo de Artur Mas, como ha admitido el consejero Andreu Mas-Colell, se aleja del cumplimiento de la meta marcada para 2013.
El Gobierno catalán ha relajado la tijera respecto al primer tramo de año, cuando estaba condicionado por unos estrictos decretos de prórroga presupuestaria con un objetivo inferior al que finalmente se le permitió desde el Ministerio de Hacienda. Hasta el mes de noviembre, el sector público gastó 20.393,1 millones de euros, apenas el 2,6% menos que en el mismo mes del año pasado. En el mismo periodo, los ingresos se incrementaron el 2,8%, hasta los 18.276,5 millones.
Dentro de la recaudación de impuestos, baja la del IRPF y sube la del IVA, aunque esta última no tiene repercusión en las arcas públicas porque a la par se reduce el fondo de Suficiencia. El impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP), en cambio, exhibe un avance del 3,4%, mientras que el de actos jurídicos documentados (AJD) baja el 19,4%. Ello se debe, según la Generalitat, a que el valor de las transacciones de segunda mano —que pagan ITP— se mantiene estable, mientras que baja el de la obra nueva, que tributa por AJD.