Puig: “¿De qué sirve más déficit si no podemos pagarlo”

El PSPV urge a reclamar la deuda histórica y cambiar el modelo de financiación

El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, y los responsables de economía del partido en Valencia.TANIA CASTRO

Una cosa es que te den margen para gastar y otra que después tengas la posibilidad de pagarlo. Los socialistas valencianos se mostraron este miércoles de acuerdo con el Consell que preside Alberto Fabra en obtener un margen más amplio de déficit en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). Sin embargo, trataron de mirar más lejos. Su secretario general,...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

Una cosa es que te den margen para gastar y otra que después tengas la posibilidad de pagarlo. Los socialistas valencianos se mostraron este miércoles de acuerdo con el Consell que preside Alberto Fabra en obtener un margen más amplio de déficit en el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). Sin embargo, trataron de mirar más lejos. Su secretario general, Ximo Puig, advirtió de que el déficit asimétrico “no resuelve el problema”. “¿De qué sirve más déficit si no hay manera de pagarlo?”, se preguntó el secretario general del PSPV-PSOE, tras reunirse con su equipo económico.

Puig, que compareció junto al portavoz parlamentario, Antonio Torres, y el responsable de Economía, el también diputado Julián López Milla, se declaró reticente a “continuar aumentando la bola de los préstamos”, en referencia a las ayudas procedentes del Gobierno a través del Plan de Pago a Proveedores, las líneas preferentes del ICO y el Fondo de Liquidez Autonómico.

“Hay que parar la tarjeta de crédito de Fabra”, señaló el dirigente socialista, que propuso empezar ya la revisión del modelo de financiación autonómica para que pueda estar operativo el año que viene, abrir la negociación bilateral con el Gobierno sobre la deuda histórica derivada de la infrafinanciación de la Comunidad Valenciana y cambiar la política de ingresos de la Generalitat.

Se trataría de que entrasen 1.000 millones más al año procedentes del sistema de financiación; de que las ayudas del Gobierno se convirtieran en aportaciones sin intereses que no hubiera que devolver, y de incrementar los recursos de la Generalitat con impuestos que Fabra se ha negado a aplicar, como los de grandes fortunas o los que gravan los depósitos bancarios, al tiempo que se ejecuta una gestión más eficaz para captar más fondos europeos.

“No se puede entender si no se hace referencia a una gestión catastrófica de la Generalitat”, indicó Puig, que atribuyó la grave situación económica al problema de financiación, en un 50%, pero también, en otro 50%, a “la gestión nefasta y la desidia de un presidente incapaz”. El líder socialista recordó que hace justo un año el Gobierno de Fabra aceptó en otra reunión del CPFF unos límites de déficit para los años sucesivos que ahora quiere cambiar. Puig reiteró que la situación de la Generalitat "no es viable" en las circunstancias actuales, pero advirtió de que el cambio de financiación autonómica no es una panacea.

Según los datos que ofreció el diputado Julián López en la conferencia de prensael déficit en las cuentas de la Generalitat prácticamente duplicó, en los años 2010, 2011 y 2012, el déficit a causa la injusta financiación autonómica. En el CPFF del año pasado no solo se fijaron objetivos de déficit, sino también de deuda, recordó. “La que más se ha excedido ha sido la Comunidad Valenciana, con un 28% del total de la deuda de las comunidades autónomas en 2012", comentó.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tanto Puig como López Milla recordaron que el servicio de la deuda se ha convertido en la “segunda consejería” de la Generalitat y que seguirá creciendo. Además, según indicó el segundo, el año que viene la Administración autonómica no solo tendrá que pagar intereses por las ayudas del Gobierno central sino que deberá hacer frente a 2.000 millones en amortizaciones de los préstamos. Condonar esas amortizaciones a cuenta de la deuda histórica es imprescindible para dar un respiro a la maltrecha economía de la Generalitat.

Archivado En