Ilan Goldfajn: “El mundo se está poniendo más adverso”
Más de la mitad de los recursos otorgados por el Fondo Monetario Internacional desde el inicio la pandemia fueron para América Latina, indica el responsable para la región del organismo
Deuda cada vez más cara. Materias primas más baratas. Inflación que no para de subir. Cuando Ilan Goldfajn (Haifa, 1966) habla del complicado panorama económico de Latinoamérica, no suaviza sus palabras. El jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la región se confiesa preocupado de las fuerzas globales que atravesará la región en lo que resta del año y en el 2023. Este “es un momento positivo de la salida de la pandemia”, dice en videollamada con EL PAÍS desde su oficina en Washington, “pero nosotros creemos que los vientos van a cambiar”.
Desde que Goldfajn asumió el cargo en...
Deuda cada vez más cara. Materias primas más baratas. Inflación que no para de subir. Cuando Ilan Goldfajn (Haifa, 1966) habla del complicado panorama económico de Latinoamérica, no suaviza sus palabras. El jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI) para la región se confiesa preocupado de las fuerzas globales que atravesará la región en lo que resta del año y en el 2023. Este “es un momento positivo de la salida de la pandemia”, dice en videollamada con EL PAÍS desde su oficina en Washington, “pero nosotros creemos que los vientos van a cambiar”.
Desde que Goldfajn asumió el cargo en enero, en sustitución del argentino Alejandro Werner, ha cerrado un nuevo acuerdo con el Gobierno argentino que hoy espera se cumpla. Exgobernador del banco central de Brasil, Goldfajn habla también del cambio en la política monetaria de los países de la región, así como de los riesgos que El Salvador tomó al hacer de bitcoin moneda legal.
Pregunta. ¿Qué está viviendo Latinoamérica en materia económica y qué es lo que viene?
Respuesta. El crecimiento ha sido fuerte en la salida de la pandemia y continuó fuerte en el primer trimestre de este año. Este momento es bueno porque los países que dependían del turismo están mejor, los que dependen de exportar materias primas también, y yo creo que es un momento positivo de la salida de la pandemia. Pero nosotros creemos que los vientos van a cambiar porque vemos que el mundo se está poniendo un poco más adverso y las condiciones financieras internacionales se van a poner más duras. No solamente porque la Reserva Federal va a subir las tasas, pero en todo el mundo vamos a tener tasas más altas. Eso significa que, de aquí en delante, en el segundo semestre y en 2023, vamos a tener una desaceleración económica. Ya estamos viendo que las materias primas comienzan a bajar de precio, algo que estaba sosteniendo a la región. Lo que viste en las proyecciones es un crecimiento este año que subió a 3% y el año que viene bajó a 2%. Este es el cambio de vientos y una preocupación es que se conjugan tres factores: endurecimiento de las condiciones financieras, crecimiento menor y materias primas más baratas.
P. Pagar la deuda privada, sujeta a calificaciones crediticias y denominada en dólares, se ha vuelto más difícil para Latinoamérica. Líderes han pedido mayor acceso a deuda de multilaterales como el Fondo. ¿Qué opina sobre esto?
R. Es siempre un ciclo y la parte del ciclo que estamos viviendo ahora es uno de un dólar fuerte y de menores entradas de capitales a la región. Eso significa que el financiamiento de instituciones internacionales como el Fondo obviamente tiene un peso mucho mayor. Hay empresas y hay algunos países a los que el mercado se les cerró o ya no emiten tanto, ni firman préstamos bancarios. Entonces, muchos países utilizan la disponibilidad de un asesor financiero como el Fondo que está ahí para ayudar. Tuvimos la pandemia, después el shock de Rusia invadiendo a Ucrania y ahora tenemos el alza de las tasas de interés. Son tres fenómenos que, en general, sacan a los países de los mercados y te reducen el financiamiento. Desde marzo de 2020, cuando inició la pandemia, hemos aprobado 181.000 millones de dólares en recursos para Latinoamérica. Una parte se repartió como parte del mecanismo rápido de emergencia, otro tanto en las líneas flexibles de crédito, así como en el programa de facilidades extendidas, el cual asignó la mayor parte de esos recursos. Y para que vea cómo la región tuvo un peso mucho mayor en el mundo: el total de los recursos fue de 277.000 millones, de los cuales 181.000 se fueron a la región. Esto tiene que ver con tu pregunta ya que, cuando no tienes tanto acceso a los mercados, el Fondo Monetario Internacional hace su papel. El del Fondo es un papel complementario, es decir, entra en los países, hace los programas, pero quiere que venga después el financiamiento privado. Entras cuando nadie quiere venir para que vengan todos ya que el programa esté andando.
P. El Fondo solía imponer requisitos de austeridad muy fuertes. Hace no mucho la mera idea de que el Fondo entrara de nuevo a Argentina, por ejemplo, era impensable y hoy celebran un nuevo acuerdo. ¿Qué cambió?
R. Todo evoluciona y hay que adaptarse a una realidad en donde lo que quieres no es solamente la sostenibilidad económica, sino también sostenibilidad social y climática. Hoy lo vemos como algo más completo, porque al mismo tiempo estás preocupado con las deudas y la consolidación fiscal, que continúa siendo algo muy importante, deben pensar en hacerlo de una forma que es socialmente sostenible. Cuando hablamos con las autoridades en nuestros países, ellos claramente tienen que tomar decisiones en materia económica, pero también social, porque tienen las demandas por servicios que sean justos y que el gobierno sea socialmente responsable con la pobreza, con la desigualdad. Hay agendas, como la de género, por ejemplo, que son nuevas para América Latina. Y también la de cambio climático, que entró en las cuestiones del Fondo porque quieres ser sostenible. El Fondo está pensando hoy de una manera macro critical, como un conjunto de cuestiones que hay que tratarlas juntas. América Latina tiene muchos países con problemas fiscales y de deuda, y muchos países tuvieron protestas y cambios de gobierno por cuestiones sociales. Está claro que necesitas consolidación fiscal inclusiva, de manera que protejas a los más vulnerables y tomes en cuenta las demandas de la gente y tengas deuda sostenible.
P. El lunes se reunieron con la ministra de Economía argentina, Silvina Batakis. ¿Qué salió de la reunión? y ¿qué será diferente entre este acuerdo y los anteriores?
R. El Fondo está siempre disponible a ayudar a los países para que implementen los programas que ellos creen que son importantes para llegar a la sostenibilidad económica y social. Ahora estamos en el momento en que pensamos que hay que concentrarse en implementar el programa. ¿Esto qué significa? Llegaste a un acuerdo y ahora tienes que implementar las metas. Hay que hacer el esfuerzo para llegar a los objetivos acordados. Y creo que lo que escuchamos, no solamente en esta reunión, pero en general de la nueva ministra, es que ella está dispuesta y quiere cumplir el acuerdo. Quiere cumplir las metas porque sabe que esa es la forma más directa de tener éxito, de alcanzar estabilidad económica y social. Fueron reuniones productivas, tanto la directora gerente [del Fondo, Kristalina Georgieva] como nosotros, nos sentamos y hablamos sobre cómo vamos a hacer para que tengamos acciones de políticas decisivas para abordar los desafíos que tienen hoy a la estabilidad económica de Argentina.
P. ¿Y es un programa realista?
R. Nosotros pensamos que los objetivos del programa tienen que ser implementados y se pueden implementar, pero hay que, obviamente, tener políticas decisivas para implementarlo muy rápido.
P. La decisión de El Salvador de hacer bitcoin moneda legal ha limitado el financiamiento con el FMI. ¿Qué posibilidades tiene en este momento el país?
R. Los objetivos son iguales a los que quedaron documentados en el Artículo IV a principio del año pasado. Ahí quedó muy clara la necesidad que tendrían de restablecer la sostenibilidad fiscal. Puedes siempre proteger a los más vulnerables, pero necesitas consolidar. En el caso de El Salvador, se piensa en otros riesgos, como el que tú señalas, la adopción del bitcoin. Esto puede llevar a riesgos más financieros y hay que pensar en cómo mitigar estos riesgos. Eso es algo que el Fondo piensa tiene que resolverse. Y hay también riesgos relacionados con la gobernanza, eso también piensa el Fondo. Vemos estos tres tipos de riesgos: de consolidación fiscal, aquellos relacionados al bitcoin como moneda legal y cosas más de gobernanza y políticas.
P. Como exgobernador de un banco central, ¿qué opina de las subidas de tasas que los bancos centrales en Latinoamérica han venido ejerciendo desde el año pasado?
R. Creo que ya teníamos puesta una institucionalidad de los bancos centrales que actuaban para contener la inflación y todos reaccionaron como deberían. Esto lo digo en el sentido de que, cuando vieron la inflación subiendo, no se tomaron su tiempo, no se dieron el lujo de esperar para ver si este era un choque de oferta que eventualmente se podía disipar. Saben que tenemos riesgo de que esta inflación pudiera entrar en el proceso de indexación o de pass-through. Los bancos centrales reaccionaron rápido y eso reafirmó su credibilidad. A pesar de que la inflación está alta y todavía no tenemos muy claro en qué momento va a empezar a bajar, tenemos una sensación de que los bancos están haciendo su papel y que si la inflación continúa subiendo ellos van a estar atentos y van a ajustar la política monetaria.