Muere Jesús Candel, ‘Spiriman’, el médico que sacó a la calle a miles de personas contra la Junta de Andalucía
El doctor, de 46 años, presentó varias querellas contra Susana Díaz y sus altos cargos de Sanidad, aunque no ganó ninguna
El médico Jesús Candel Fábregas, conocido como Spiriman, ha fallecido la noche del jueves al viernes en su casa de Albolote (Granada), a consecuencia del cáncer de pulmón que le fue diagnosticado en agosto de 2020. Spiriman inició su lucha contra la sanidad pública en Granada en 2016. El 16 de octubre de ese año convocó una manifestación en la ciudad en protesta por la decisión de la Junta de Andalucía de aunar dos hospitales, uno de nueva creación y otro preexistente, en un único centr...
El médico Jesús Candel Fábregas, conocido como Spiriman, ha fallecido la noche del jueves al viernes en su casa de Albolote (Granada), a consecuencia del cáncer de pulmón que le fue diagnosticado en agosto de 2020. Spiriman inició su lucha contra la sanidad pública en Granada en 2016. El 16 de octubre de ese año convocó una manifestación en la ciudad en protesta por la decisión de la Junta de Andalucía de aunar dos hospitales, uno de nueva creación y otro preexistente, en un único centro. Aquella marcha tuvo mucho éxito y se repitió hasta en cuatro ocasiones en el ámbito local. En diciembre, trasladó su movimiento a Jaén y, desde entonces, amplió su ámbito a toda Andalucía y centró su objetivo en la sanidad andaluza en general, culpando muy personalmente de lo que él consideraba mal funcionamiento y corrupción a la entonces presidenta del Gobierno andaluz, Susana Díaz.
Candel fue muy activo tanto en la calle como en las redes sociales y siempre contó con un respaldo grande y casi más personalizado en él que en la causa que defendía. Las manifestaciones granadinas de 2016, siempre multitudinarias, se ampliaron ese año a Jaén y en 2017, cuando convocó hasta una docena, llegaron a Algeciras y Huelva. Antes, a principios de 2017, con apenas un año de marea blanca en las calles, Candel consiguió –aunque nunca se admitió desde el Gobierno andaluz que fuera gracias a su lucha– la renuncia del viceconsejero de Salud, Martín Blanco García, blanco de todas las críticas de Spiriman en aquellos meses, y del entonces gerente del Servicio Andaluz de Salud, José Manuel Aranda. En el ámbito granadino, el de los hospitales que se pretendían unificar, también hubo varias dimisiones relevantes. Fue así como las manifestaciones de Candel comenzaron a hacer mella en el PSOE y en el Gobierno andaluz de entonces. En junio de aquel año, el entonces consejero de Salud, Aquilino Alonso ―como Martín Blanco, con conexiones granadinas― fue relevado de su cargo tras unos meses de mucha convulsión en la calle y en las redes sociales.
En junio de 2018, Jesús Candel dio el paso de llamar a la calle en Sevilla, a las puertas de la sede de la presidencia de la Junta, bajo el lema “Por una sanidad pública digna y completa”. Como en las ocasiones anteriores, miles de personas acudieron a su llamada. Por aquel entonces creó, además, la Asociación Justicia por la Sanidad, “en respuesta a las demandas de los usuarios para mejorar el sistema sanitario en Granada y el resto de Andalucía” según la página web de la asociación. Entre sus objetivos, además de lograr una sanidad pública, se encontraba el de “vigilar las actuaciones de los gestores públicos y denunciar aquellas que pudieran afectar negativamente a los pacientes y demás usuarios del Sistema Nacional de Salud, así como las que vulneren el ordenamiento jurídico”.
Y a eso se dedicó con intensidad a partir de ese momento. Los años 2019 y 2020 fueron especialmente intensos en denuncias y querellas contra Susana Díaz y los responsables del departamento de salud andaluz en esa época. Los acusó de corrupción, manipulación de las listas de espera, fraude, etcétera, aunque nunca ganó en los tribunales. Hace unos meses, en cambio, el Tribunal Supremo condenó a Spiriman a pagar una multa de algo más de 6.000 euros y a indemnizar con 5.000 a Susana Díaz y a Martín Blanco por injurias en algunos de sus vídeos publicados en redes sociales.
Si el papel de la calle fue importante en su lucha, también las redes sociales cumplieron un papel determinante en ello. Facebook y YouTube alojan decenas de videos en los que, con mucho énfasis, arremetía contra los responsables políticos en general y de Sanidad en particular. Era frecuente que rodara esos vídeos, de hasta 15 minutos o más, paseando por el campo cercano a su residencia y, con frecuencia, en paradas que hacía en la carretera cuando viajaba de Granada a Sevilla para hacer alguna gestión de su lucha. Tras el diagnóstico de su enfermedad, Spiriman se retiró del ámbito público. Su actividad en redes, aunque muy disminuida, no la abandonó nunca y hace unos días publicaba una de esas grabaciones hablando sobre cómo se encontraba.
La lucha de Candel contra Susana Díaz y su equipo de gestión sanitaria acabó desgastando al PSOE, que no quería oír hablar de él en la época en que gobernaba Andalucía. Si sus convocatorias callejeras ―quizás las que más ruido hicieron contra la Junta andaluza en años― no marcaron el principio del fin del Gobierno de Susana Díaz, sí contribuyeron a su desgaste. Con el tiempo, no obstante, las formas de Candel fueron perdiéndose y comenzó a insultar a unos y otros. También hay quien considera que su lucha se convirtió en una lucha más política que social según fue pasando el tiempo, con partidos como el PP infiltrado con fuerza en la asociación y en sus manifestaciones.
Casado y con cuatro hijos, Jesús Candel era médico de familia especializado en urgencias y ejercía su labor profesional en Granada capital. Para su lucha adoptó el apodo Spiriman que, con el tiempo, amplió con la palabra yeah, con la que terminaba todos sus videos y que sus seguidores adoptaron como forma de apoyo a sus objetivos. Además de su activismo por la salud, presidía la Fundación Spiribol, de promoción del deporte para niños con dificultades sociales, según explicó él mismo. En 2020, pocos meses después del diagnóstico de su enfermedad, Twitter le cerró la cuenta por un comentario sobre el cáncer —“el que se quiere curar de cáncer se cura y el que no, se muere”— que generó mucha controversia. También escribió el libro Lucha por lo justo.
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha lamentado la pérdida del médico. “Defendió con pasión la sanidad pública y la calidad de vida de los pacientes oncológicos. Siento su pérdida”, ha compartido en un tuit.