Las autoridades rebajan la alerta por la calidad del aire y levantan los confinamientos en La Palma
El volcán mantiene su virulencia y ha arrasado con 28,3 kilómetros de carreteras, y 1.005 casas. La superficie ganada al mar alcanza las 27,7 hectáreas y 540 metros de distancia desde la línea de costa
El Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), el comité de crisis que gestiona la erupción del volcán de La Palma, ha levantado todos los confinamientos decretados en La Palma derivados del empeoramiento del aire, tanto los ordenados en la noche del viernes, que afectaban a 3.500 personas en varias zonas de Los Llanos de Aridane y El Paso, y las cuatro localidades en el municipio de Tazacorte confinadas esta s...
El Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca), el comité de crisis que gestiona la erupción del volcán de La Palma, ha levantado todos los confinamientos decretados en La Palma derivados del empeoramiento del aire, tanto los ordenados en la noche del viernes, que afectaban a 3.500 personas en varias zonas de Los Llanos de Aridane y El Paso, y las cuatro localidades en el municipio de Tazacorte confinadas esta semana (San Borondón, Marina Alta, Marina Baja y La Condesa).
A esta buena noticia le ha seguido una advertencia. El director técnico del Pevolca, Miguel Ángel Morcuende, ha avisado, sin embargo, de que las condiciones meteorológicas actuales, de vientos calmados y entrada de polvo sahariano, “y una inversión térmica que actúa de tapadera”, no favorecen la dispersión de los gases contaminantes, por lo que no se descartan nuevas medidas de confinamiento, que serán avisadas a la población mediante megafonía. En esos posibles episodios en los que se altera puntualmente la calidad del aire, las molestias son leves, como picor de ojos, y se recomienda a las personas que tienen el sistema inmunológico débil, a niños pequeños y embarazadas que extremen las precauciones.
El volcán está lejos de presentar síntomas de apaciguamiento. Sigue alternando fases explosivas (cuyos gases alcanzan los 4.500 metros de altura) con otras denominadas efusivas, en las que mana una lava más líquida, según las explicaciones de Carmen López, responsable nacional de vigilancia volcánica del IGN. La colada que comenzó a brotar en la madrugada del viernes del nuevo cono doble ha alcanzado el final del camino de Los Campitos, en los Llanos de Aridane, punto en el que ha establecido contacto lateral con las coladas anteriores. Se da la circunstancia de que la colada primigenia arrasó el lunes 20, el día siguiente a la erupción, el colegio público de esta localidad.
El terreno ganado al mar ha alcanzado las 27,7 hectáreas y 540 metros de distancia desde la línea de costa y 35 metros de profundidad, y sigue expandiéndose tanto al norte como al sur. Las fumarolas que desprenden, compuestas de “cantidades considerablemente altas” de vapor de agua y ácido clorhídrico no entran en el territorio, dado que, como asegura López, “se limitan a la zona de contacto con el mar”. En todo caso, los efectos de este penacho “no deben subestimarse, pero tampoco han de causar alarma”.
El Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan) ha confirmado además la apertura de un nuevo foco de emisión en la fractura principal, que se viene a sumar a las dos nuevas bocas que surgieron en la madrugada del viernes. El organismo ha compartido un vídeo con imágenes de este nuevo foco que han sido captadas por un dron a las 10.30, donde se puede observar cómo ya se están emitiendo elementos líquidos, sólidos (como el magma y los piroclastos) y también gaseosos.
Los terremotos siguen haciéndose notar en La Palma. Se han registrado decenas de seismos en las últimas 24 horas, con picos de 3,6, perfectamente perceptibles por la población. “Estaba sentado en el coche y las puertas han empezado a moverse mucho, creía que alguien me estaba jalando [tirando] del coche”, ha explicado esta mañana Samuel González, uno de los que hacía cola en la mañana del sábado en la LP 2 para entrar en su casa en la localidad de Jedey.
Así las cosas, la erupción del volcán afecta ya a unas 1.005 construcciones, de las cuales 880 han sido destruidas totalmente, según los últimos datos disponibles del satélite Corpernicus. Fuentes del Instituto Geográfico Nacional han advertido, frente al relajamiento de la alerta de la ciudadanía, que las personas no se acerquen a las coladas de lava dada su peligrosidad, tanto por los gases que emite como por su temperatura o los posibles derrumbamientos.
El Consorcio de Compensación de Seguros (CCS), que depende del Ministerio de Asuntos Económicos, ha comenzado a realizar los primeros pagos a los asegurados de la isla a través de transferencias bancarias. El montante, hasta ahora, asciende a 624.243 euros. Hasta el momento, el CCS ha recibido 289 solicitudes de indemnización, que corresponden a 230 viviendas, 43 automóviles, 15 comercios y una industria.