La Fiscalía abre una investigación de oficio sobre la marcha neonazi de Chueca por delito de odio

El ministerio público ha pedido informes a la Brigada Provincial de Información y a la Delegación del Gobierno sobre la manifestación. Dos ministerios denuncian también el acto

Manifestación de extrema derecha y neonazis desde la plaza de Chueca hasta la Puerta del Sol. En el recorrido gritaron cosas como “fuera maricas de nuestros barrios”. En vídeo, imágenes de los disturbios.Vídeo: OLMO CALVO / EPV

La Fiscalía Provincial de Madrid, por iniciativa propia, ha abierto diligencias de investigación penal sobre la marcha neonazi que se celebró el pasado sábado en Madrid, en la que se profirieron gritos homófobos y xenófobos. El ministerio público ya ha pedido sendos informes a la Brigada Provincial de Información y a la Delegación del Gobierno para que recaben información sobre si lo acontecido durante la marcha convocada por el grupo Madrid Seguro para protestar contra “agendas 2030/2050” es constitutivo de un ...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La Fiscalía Provincial de Madrid, por iniciativa propia, ha abierto diligencias de investigación penal sobre la marcha neonazi que se celebró el pasado sábado en Madrid, en la que se profirieron gritos homófobos y xenófobos. El ministerio público ya ha pedido sendos informes a la Brigada Provincial de Información y a la Delegación del Gobierno para que recaben información sobre si lo acontecido durante la marcha convocada por el grupo Madrid Seguro para protestar contra “agendas 2030/2050” es constitutivo de un delito de odio. Los ministerios de Igualdad y Derechos Sociales han formalizado su denuncia ante la Fiscalía de Sala de Delitos de Odio y Discriminación por estos hechos y piden que se recaben “fotografías y grabaciones de imagen y sonido” para constatar lo ocurrido e identificar a los responsables.

Más información

La manifestación recorrió el centro de la capital y pasó, en entre otros sitios, por el barrio de Chueca, epicentro del movimiento LGTBI. Durante el recorrido se escucharon consignas como “fuera sidosos de Madrid” o “fuera maricas de nuestros barrios”. Los participantes portaban también carteles en contra de los menores extranjeros no acompañados.

La marcha fue autorizada por la Delegación de Gobierno y fue solicitada por la Asociación de Vecinos San Blas-Canillejas. En la solicitud, especificaban que la manifestación se englobaba bajo lema “Di no a las Agendas 2030-2050”. Un portavoz de la delegación precisó que no se autorizó ni una marcha nazi ni una manifestación homófoba.

La Agenda 2030 es el nombre con el que se conoce al protocolo de acción acordado por la ONU para alcanzar los llamados Objetivos de Desarrollo Sostenible, que incluyen metas como la igualdad de género, la creación de ciudades con menos contaminación o que el saneamiento de agua llegue a todos los países del mundo. La vicepresidencia que ostentó Pablo Iglesias incluía las tareas destinadas al Gobierno. Ahora está entre las atribuciones de la ministra Ione Belarra.

Durante la marcha, que duró alrededor de dos horas, los participantes encendieron bengalas, ondearon banderas y portaron pancartas con simbología de extrema derecha, mostraron su repulsa al colectivo LGTBI, a los menores no acompañados y a los inmigrantes. También realizaron en numerosas ocasiones el saludo fascista. Durante el recorrido hubo un detenido por “agresión a otro manifestante”.

La ministra de Igualdad, Irene Montero, ya había anunciado que el Gobierno pondría en conocimiento de la Fiscalía la manifestación en la que participaron unas 200 personas. Y la ha presentado finalmente junto con Derechos Sociales, que encabeza Belarra. Ambas son de Unidas Podemos.

En la denuncia de los ministerios, señalan que, aunque la convocatoria “no se dirigía expresamente contra los colectivos discriminados por razón de raza, origen, orientación o identidad sexual”, durante la marcha se realizaron “proclamas ofensivas” contra el colectivo LGTBI, personas extranjeras o enfermos de VIH. Los participantes hicieron “apología del régimen nazi, máximo símbolo histórico de las prácticas genocidas y los delitos de lesa humanidad”, indican en el texto. Añaden que estos hechos son “idóneos para alterar la paz pública y crear un grave sentimiento de inseguridad o temor entre los integrantes de los grupos destinatarios de los mensajes de odio y discriminación”.

Tras la presentación de la denuncia conjunta ante la Fiscalía, la ministra de Derechos Sociales ha afirmado en redes sociales que esta “expresión de intolerancia es incompatible con la convivencia en democracia”. “Merecemos barrios y pueblos libres de odio”, ha añadido Belarra. En la misma línea, Irene Montero ha destacado en una comparecencia la “importancia” de lanzar “un mensaje contundente” a las personas LGTBI y racializadas. “Cuentan con el apoyo de este ministerio”, ha dicho antes de reivindicar la urgencia en la tramitación de la ley LGTBI y de garantía de los derechos de las personas trans, conocida popularmente como ley trans. Un mensaje que no solo ha dirigido a los “neonazis”, sino también a “todos aquellos que sentados en el Consejo de Administración de un medio de comunicación, en un escaño del Congreso o en una asamblea autonómica están legitimando, blanqueando y normalizando esos discurso de odio”, informa Paula Chouza.

Por su parte, la portavoz de Podemos, Isa Serra, ha pedido que se “asuman responsabilidades” por la manifestación del sábado. “Consideramos que un hecho así no tiene cabida en democracia. Por tanto, hay que investigar qué ha sucedido para que finalmente haya nazis en las calles de Madrid amenazando a las personas”. En rueda de prensa, Serra ha criticado que Ayuso todavía no haya condenado lo ocurrido. “Exigimos a todos los grupos políticos y en especial a la señora Ayuso y al PP que se manifiesten en contra y rechacen actos como este”.

El PP, Ciudadanos, Vox, Más Madrid, PSOE, Podemos e IU condenaron el domingo las consignas que se pudieron escuchar en la marcha. La portavoz del Gobierno municipal de Madrid y delegada de Seguridad y Emergencias, Inmaculada Sanz, indicó en un acto este domingo sobre los participantes: “Son pequeños grupos de personas completamente ajenas a nuestro sistema de valores”. “Madrid no es eso, es una ciudad abierta, solidaria, que acoge, que integra a la población inmigrante y a personas de todas las sensibilidades”, añadió.

Los delitos de odio han experimentado un gran repunte. En el primer semestre de 2021 la policía recibió 610 denuncias, un 9,3% más que en el mismo periodo de 2019, cuando no había restricciones de movilidad.

Más información

Archivado En