España alcanza los 25 millones de personas vacunadas
El Gobierno logra el cuarto hito marcado en su estrategia de inmunización masiva contra la covid: cerrar la cuarta semana de julio con más del 50% (es el 53%) de la población con la pauta completa
España logra cumplir el cuarto objetivo marcado por el Gobierno dentro de la estrategia nacional de inmunización contra la covid-19: cerrar la cuarta semana de julio con 25 millones de personas vacunadas con la pauta completa. El Ministerio de Sanidad ha confirmado este jueves que el 52,8% de la población —en concreto, 25.060.958 millones de personas— ha finalizado el ciclo vacunal. ...
España logra cumplir el cuarto objetivo marcado por el Gobierno dentro de la estrategia nacional de inmunización contra la covid-19: cerrar la cuarta semana de julio con 25 millones de personas vacunadas con la pauta completa. El Ministerio de Sanidad ha confirmado este jueves que el 52,8% de la población —en concreto, 25.060.958 millones de personas— ha finalizado el ciclo vacunal. En plena quinta ola, con los contagios al alza y la incidencia acumulada por encima de 659 casos por 100.000 habitantes, España está inmersa ahora en la vacunación a los más jóvenes y la repesca de ciudadanos de los grupos más vulnerables que se han quedado rezagados.
El Gobierno ha cumplido tres de los cuatro objetivos marcados hasta la fecha: solo la meta anterior ―llegar al 20 de junio con 15 millones de personas con la pauta vacunal completa― se quedó en el aire por poco más de 560.000 personas, aunque aquel pequeño retraso ya se ha recuperado. El ritmo de inoculación no baja y las comunidades pinchan la mayoría de las vacunas que les van llegando. Salvador Peiró, epidemiólogo de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana (Fisabio), asegura que “la vacunación va todo lo bien que puede ir con las vacunas disponibles”. España ha recibido cerca de 56 millones de dosis desde el inicio de la campaña vacunal y las comunidades han inyectado, según el último informe del Ministerio de Sanidad, el 94,6% de ellas. “Llegan menos dosis que en junio, pero se va avanzando a buen ritmo”, insiste el epidemiólogo
En junio, Pfizer-BioNTech adelantó remesas de dosis previstas para el cuarto trimestre y, entre estas y las partidas del resto de vacunas, llegaron a España casi 19 millones de unidades. En lo que va de julio se han recibido casi nueve millones. Las comunidades pinchan entre 500.00 y 700.000 dosis diarias y, a diferencia de los grandes países europeos ―como Francia, Alemania o Italia―, donde el ritmo de pinchazos se ha ralentizado o estancado, España mantiene la tendencia estable o al alza. José Martínez Olmos, profesor de la Escuela Andaluza de Salud Pública, defiende que en España hay pocas reticencias a la vacuna. “Estamos aplicando las vacunas que nos llegan por tener un sistema accesible, universal, y hay una gran predisposición de la población a la vacuna. Aunque, ojo, nos queda por vacunar a la población joven y, aunque seguramente seguirá el mismo ritmo, no nos podemos confiar: hay que insistir en los beneficios de la vacuna”. Más de la mitad de la población adulta europea (el 53%, según el Centro Europeo de Control de Enfermedades) ha completado la pauta vacunal.
España enfila el verano con la inmensa mayoría de su población más vulnerable plenamente protegida. La estrategia española priorizó los pinchazos a la gente de más edad y con mayor riesgo de sufrir una covid grave o morir, y, siete meses después de las primeras inyecciones, la cobertura es casi total en los mayores de 70 años. El 84,4% de los sexagenarios y el 86,5% del grupo de 50 a 59 años también tienen la pauta vacunal completa.
Quedan por delante los grupos más jóvenes, que es en los que se está cebando ahora el virus. Al ser los sectores de la población menos protegidos y, a la vez, los que acostumbran a tener los mayores niveles de interacción social, la incidencia acumulada ―sobre todo en veinteañeros y adolescentes― está disparada (1.863,77 y 1.586,66 casos por 100.000 habitantes, respectivamente). Por lo pronto, más de dos tercios de las personas de 40 a 49 años ya están plenamente vacunados y casi el 60% de los treintañeros han recibido la primera dosis. Varias comunidades, además, han abierto ya las citas a las personas de 20 a 29 años y a los adolescentes.
“Vacunar a estos grupos servirá”, tercia Peiró, “pero lo que vacunamos hoy no llega a tener protección suficiente hasta dentro de cinco semanas. Y menos con la variante delta circulando, para la que la protección de la primera dosis es menor. La ola hay que controlarla con lo clásico: medidas de reducción de contactos”, insiste. Varias comunidades han conseguido el aval de la justicia para decretar restricciones severas que afectan a derechos fundamentales, como el toque de queda o la limitación de reuniones. Cataluña y la Comunidad Valenciana tienen limitaciones en la movilidad nocturna y también Aragón, Navarra y Asturias lo han pedido a sus respectivos tribunales, informa Efe. En Baleares están prohibidas las reuniones sociales entre la 1.00 y las 6.00 horas cuando la incidencia acumulada a 14 días supere los 450 casos por 100.000 habitantes y Murcia ha limitado las reuniones informales a grupos de 10 personas como máximo.
Martínez Olmos recuerda que todavía queda un colectivo amplio de personas susceptibles de infectarse y la prioridad debe ser seguir vacunando. De hecho, aunque los pinchazos han logrado una alta protección contra la enfermedad grave y la muerte en los grupos más vulnerables, la atención primaria sigue desbordada con el auge de nuevos contagios y la ocupación en los hospitales ha vuelto a crecer: 7.618 personas están ingresadas a causa de la covid y, de ellas, 1.240 está en cuidados intensivos (UCI). Esto significa que el 13,5% de las plazas de críticos disponibles en España están ocupadas por enfermos con covid, aunque este porcentaje roza el 40% en el caso de Cataluña, donde la presión asistencial es más elevada.
Inmunidad de grupo
El último objetivo pendiente anunciado por el Gobierno es cerrar agosto con el 70% de la población española vacunada con la pauta completa. Este porcentaje estaba considerado por expertos y autoridades como el umbral para alcanzar la inmunidad de grupo, una cobertura poblacional que dificultaría la circulación del virus. Los epidemiólogos consultados, no obstante, matizan ahora que coberturas del 70% serán insuficientes para parar la pandemia. Para empezar, porque la variante delta, que llegará a ser predominante en Europa en agosto, es hasta un 60% más transmisible. “El concepto de inmunidad requiere que sea homogéneo para que surta efecto”, sostiene Martínez Olmos. “Dudo que el 70% vaya a dar inmunidad de grupo. Lo que hay que hacer es llegar al 100% de la población susceptible de vacunar”. Peiró coincide y agrega que “el verano tampoco va a ayudar mucho” a acelerar los pinchazos y “las altas tasas de contagio también retrasarán la cobertura vacunal”, ya que una persona infectada menor de 65 años tiene que esperar seis meses después de la infección para vacunarse.
Los expertos piden no bajar la guardia y repescar también a todas las personas vulnerables que se han quedado rezagadas, una estrategia que ya han puesto en marcha varias comunidades, como Cataluña, que ha desplegado autobuses por algunas zonas de la región para acercar todavía más la vacunación a la calle y facilitar el acceso al sistema. Los epidemiólogos avisan a las Administraciones también de que tengan cuidado con los anuncios triunfalistas. Peiró alerta: “Los mensajes de que la vacunación va como un tiro reducen la percepción de riesgo. La estrategia de fondo tiene que ser inmunizar al máximo de gente por la vía de la vacuna, no por la vía salvaje”.