Las dosis previstas de la vacuna cubrirían al menos un pinchazo al 70% de la población adulta en junio
22,7 millones de españoles podrían tener el tratamiento completo a principios de verano
Las cuentas con las vacunas siguen saliendo. A pesar de los baches, del parón de AstraZeneca, de los retrasos y de la lentitud de la Unión Europea si se compara con países como Estados Unidos, Israel o el Reino Unido, si se cumplen las previsiones que maneja la Comisión, las dosis serían suficientes para vacunar al 70% de los europeos a principios del verano. España se ha comprometido a llegar a ese porcentaje antes del ...
Las cuentas con las vacunas siguen saliendo. A pesar de los baches, del parón de AstraZeneca, de los retrasos y de la lentitud de la Unión Europea si se compara con países como Estados Unidos, Israel o el Reino Unido, si se cumplen las previsiones que maneja la Comisión, las dosis serían suficientes para vacunar al 70% de los europeos a principios del verano. España se ha comprometido a llegar a ese porcentaje antes del 21 de septiembre, cuando termine esta estación, pero si no hay problemas con los suministros acordados y las dosis se administran en tiempo y forma, esto podría suceder ya en junio.
Thierry Breton, responsable de las compras colectivas de la vacuna de la UE, reiteró el domingo en la televisión francesa TF1 que la previsión sigue siendo entregar a los Veintisiete entre 300 y 350 millones de dosis en el segundo trimestre. Siendo conservadores, a España le corresponderían 30 millones de estas dosis. Sumadas a las que hay en reserva (1,3 millones) y las que tienen que llegar esta semana (casi un millón), suponen 32,3 millones. Teniendo en cuenta las personas que ya hay vacunadas, serían suficientes para la inmunización completa (con doble pauta en las vacunas que lo requieran) al 58% de la población entre finales de junio y principios de julio. Pero el ritmo de vacunación no sigue esta lógica: ahora no se aspira a cerrar el ciclo, y muchas personas estarán esperando la segunda dosis, de forma que es probable que se pudiera llegar a más del 70% de la población con, al menos, un pinchazo.
La clave para alcanzar la cifra es que la UE prevé que se multiplique la fabricación de vacunas conforme vayan transcurriendo los meses. Los problemas que ha habido hasta ahora, si se cumplen estos planes, se paliarían con creces. Incluso los incumplimientos de AstraZeneca y la guerra comercial que la farmacéutica tiene con Europa serían solo un pequeño escollo que no impediría alcanzar la cifra, siempre y cuando no surjan nuevos problemas con otros fabricantes. El embudo podría estar más bien en la capacidad de los Estados para administrar las dosis que en su disponibilidad.
Aunque no se sabe exactamente cuántas dosis de cada farmacéutica llegarán, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, desveló el domingo en La Sexta que España recibirá en el segundo trimestre 5,5 millones de Janssen, que requiere una sola dosis. Esto permite hacer unos cálculos que hasta ahora eran imposibles, ya que en función de la cifra de esta vacuna de un solo pinchazo, la velocidad para alcanzar los objetivos varía sustancialmente.
Posible embudo
El plan es alcanzar el 70% de la población adulta vacunada durante el verano. En España esto equivale a 27,4 millones de personas. Según los últimos datos de Sanidad, ya hay 2,1 millones con la pauta completa y quedan otros 2,1 millones con una dosis a la espera de la segunda. Además, hay que tener en cuenta que a los menores de 55 años que hayan tenido diagnóstico positivo en los seis meses previos solo se les administrará una dosis, ya que es suficiente para una activación completa del sistema inmunitario. Aunque esta cifra no es pública, con las cifras de casos registrados de Sanidad y de franjas de edad desde junio que publica el Instituto de Salud Carlos III, se puede hacer una aproximación. Habría unos 1,2 millones de personas en esta situación.
Si se suman los 5,5 millones que recibirán las vacunas monodosis de Janssen, más los 2,1 millones que esperan la segunda dosis, más los 1,2 millones menores de 55 años que ya han pasado la enfermedad y por lo tanto recibirán solo un pinchazo, el resultado es que para inmunizar por completo a esta población se requieren unos 8,8 millones de dosis. El total, añadiendo los 2,1 que ya han recibido la pauta completa, es de casi 10,9 millones de personas completamente inmunizadas.
Si de los 32,3 millones de dosis disponibles previstas se restan esos 8,8 millones, quedarían, en el segundo trimestre, otros 23,5 millones de dosis, según las previsiones de la Comisión. Con ellas se podría poner doble pauta a casi 11,8 millones de personas adicionales. Añadiendo los 10,9 millones anteriores, el total son casi 22,7 millones pautas completas, el 58% de la población adulta.
Pero, de nuevo, ese no será el orden exacto. En realidad habrá, si se ponen todas las vacunas que llegan, un porcentaje superior a ese con la primera dosis y uno inferior con la pauta completa. Y desde julio la llegada, previsiblemente, se acelerará.
La conclusión, con estas previsiones, es que el embudo no estará en el número de dosis. Sí puede estarlo en el ritmo de administración que sea capaz de alcanzar el sistema. En una entrevista con EL PAÍS, Darias aseguró que eso no será un problema, que todas las comunidades están presentando planes y que ampliarán sus capacidades cuanto sea necesario, ya sea contratando sanitarios, doblando turnos o contando con la ayuda de las mutuas privadas, en centros de salud y en grandes instalaciones, cuando sea necesario.
El ritmo con Pfizer es del 99%
La experiencia hasta ahora es que el ritmo es muy bueno con Pfizer, pero no tanto con AstraZeneca. Los ritmos de llegada de Moderna son tan irregulares que es complicado valorarlos. El último día que permite evaluar este ritmo, en el caso de Pfizer, es el pasado martes, ya que los miércoles las comunidades reciben los nuevos cargamentos y empieza un nuevo ciclo. El martes 16 de marzo se habían inyectado casi el 99% de las dosis que habían llegado de esta farmacéutica.
En el caso de AstraZeneca hay que remontarse antes, ya que el lunes 15 se paró la vacunación con este suero a la espera de que la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) investigara unos casos de trombos tras la inoculación. Es necesario tomar la cifra del 9 de marzo, cuando se habían puesto tan solo un 60% de las dosis. Con el parón, esta cifra hay caído todavía más: hay casi un millón de vacunas de la farmacéutica anglosueca almacenadas, casi tantas como las que se han inyectado. El ritmo de administración de este suero tendrá que subir rápidamente para alcanzar los objetivos cuando se reanuden las vacunaciones, este miércoles, después de que la EMA no hallase vínculo entre los trombos y el medicamento.
Esta vacuna se tendrá que enfrentar ahora a un posible rechazo de la opinión pública. Pese a que tanto este organismo europeo como la Organización Mundial de la Salud, como el Ministerio de Sanidad insisten en que es segura y que sus beneficios superan con creces a sus riesgos, la mitad de los españoles desconfían de ella. Según una encuesta de YouGov, un 52% cree que es “insegura”, frente al 25% de finales de febrero.