La innovación social es el motor de la nueva economía

El modelo empresarial español se enfrenta a grandes cambios provocados por los avances tecnológicos y el comportamiento del consumidor. Los modelos de negocio tradicionales son caducos y por ello es crucial apostar por sistemas alternativos que caminen en línea de la tecnología y de la cultura social. La sociedad está demandando a las empresas un mayor compromiso social y medio ambiental. Y para lograrlo con éxito se antoja crucial servirse de la tecnología, que al fin y al cabo es un medio para facilitar y mejorar la vida de las personas.

¿Lo estamos haciendo? Según los últimos datos o...

El modelo empresarial español se enfrenta a grandes cambios provocados por los avances tecnológicos y el comportamiento del consumidor. Los modelos de negocio tradicionales son caducos y por ello es crucial apostar por sistemas alternativos que caminen en línea de la tecnología y de la cultura social. La sociedad está demandando a las empresas un mayor compromiso social y medio ambiental. Y para lograrlo con éxito se antoja crucial servirse de la tecnología, que al fin y al cabo es un medio para facilitar y mejorar la vida de las personas.

¿Lo estamos haciendo? Según los últimos datos ofrecidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE) solo el 29% de las empresas han sido innovadoras, con la inversión en tecnología en 13.857 millones de euros. Estos datos demuestran que el cambio sustancial aún está por llegar y que la inversión en tecnología está muy por debajo de las necesidades actuales tanto del mercado como de la sociedad.

Hay que revertir la situación. La innovación social debe ser uno de los pilares en los que se tiene que apoyar la estrategia económica de una empresa si quiere competir con garantías en este nuevo escenario. Los modelos empresariales basados en la innovación son los que están llamados a resolver los problemas del mundo y a hacerse con las grandes cuotas del mercado. Así se puede observar a través de varios ejemplos de empresas GIP (generadoras de un impacto positivo) que ya apuestan por modelos que caminan en línea de la tecnología y de la cultura social.

Empresas sostenibles, accesibles y diversas

Compañías como Ilunion llevan trabajando en esta línea desde hace décadas. En 1994 lanzó el sistema Ciberpas, el modelo precedente a los semáforos inteligentes. Se trataba de un avisador acústico que transmitía la información auditiva a través de un mando a distancia. De este modo, los viandantes podían acceder a esta información cuando la requiriesen minimizando, también, la contaminación acústica.

Desde el lanzamiento de este sistema pionero se han creado varios modelos de Ciberpas, y ya se han instalado más de 30.000 equipos repartidos por toda España. De hecho, Ilunion ha desarrollado recientemente un producto más completo y adelantado al semáforo inteligente: Pasblue, basado en la normativa del Diseño para Todos. Este sistema integra algunas novedades como:

• La información acústica se activa gracias al sistema bluetooth de los smarthpones. Aunque aún permite la opción de hacerlo a través del mando a distancia, como sus predecesores.
• El usuario puede beneficiarse de una mayor orientación y seguridad gracias a la tecnología inalámbrica, que le permite conocer con mayor exactitud la ubicación precisa de donde se encuentra.
• Pasblue posibilita una opción para retransmitir información útil para el peatón: eventos que se celebran cerca, localización de las obras, nombre de las calles, etc.
• Mayor ahorro de energía gracias a la implantación de los LEDS. En torno a un 10% de ahorro.

En la lucha por la preservación y el cuidado del medio ambiente han nacido algunas iniciativas que caminan de la mano de la tecnología dispuestas a irrumpir con fuerza en el mundo de la sostenibilidad. Recientemente un equipo de investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid, en concreto del área de la ETSIDI (Escuela Técnica Superior de Ingeniería y Diseño Industrial), ha realizado con éxito un proyecto para degradar los CECs (Contaminantes de Preocupación Emergente) a través de la impresión tridimensional de fotocatalizadores flotantes. Estos fotocalizadores, junto a la radiación solar que opera como único reactivo, logran eliminar los CECs en un proceso eficiente en todas sus vertientes (económica, de implantación, respetuoso con el medio ambiente, etc).

Otra manera de utilizar la tecnología para virar hacia un modelo de negocio más social y responsable es basando la estrategia de negocio en las personas. La mayor ventaja que ofrece la tecnología es su carácter objetivo e imparcial. Un gran ejemplo a destacar es el trabajo que se está haciendo desde The Key Talent, donde utilizan las nuevas tendencias tecnológicas y algoritmos para la captación de talento en el área de recursos humanos. Con este tipo de objetivos se asegura la imparcialidad en los procesos de selección, fomentando la diversidad y eliminando las discriminaciones por sexo, edad o raza. Así lo realizaron con un proceso de selección de IKEA donde utilizaron el CV ciego y de un total de 5.600 candidatos, 481 llegaron a la fase final, siendo 94 de ellas personas mayores de 40 años.

Medidas para incentivar la innovación social

Este tipo de iniciativas, generadoras de un impacto positivo para la sociedad, nacen de proyectos o empresas que caminan de la mano de la tecnología. Es clave, por tanto, que la Administración acometa con garantías la transformación digital, ya no para poder competir con garantías con los socios europeos, sino para responder a las demandas sociales de los ciudadanos, quienes exigen día a día mayor igualdad, respeto por el medio ambiente e inclusión social.

Daniel Marote es socio director de Hydra.digital y experto en experiencia de cliente, marketing y transformación digital.