I+D español y chino: caminos opuestos
Hubo un tiempo en que superábamos a China en I+D. Pero en 2008 la inversión en España inició un declive sin retorno mientras China multiplicaba sus recursos. Y en la cima mundial, siempre Israel.
Ya no cabe duda, el dragón ha despertado. China empezó a superar la inversión española en I+D en 1996, poco después de que el gobierno aprobase su 'Decisión para acelerar el desarrollo científico y tecnológico'. Desde entonces, ha mantenido una tendencia creciente sin excepciones. Una sucesión de máximos históricos que alcanzó en 2016 el 2,1% de su Producto Interior Bruto (PIB).
Las industrias farmacéutica, informática, electrónica, óptica y aeroespacial represental el 33,4% del total de las exportaciones chinas. Además, España también perdió en 2010 la delantera en lo relativo al regis...
Ya no cabe duda, el dragón ha despertado. China empezó a superar la inversión española en I+D en 1996, poco después de que el gobierno aprobase su 'Decisión para acelerar el desarrollo científico y tecnológico'. Desde entonces, ha mantenido una tendencia creciente sin excepciones. Una sucesión de máximos históricos que alcanzó en 2016 el 2,1% de su Producto Interior Bruto (PIB).
Las industrias farmacéutica, informática, electrónica, óptica y aeroespacial represental el 33,4% del total de las exportaciones chinas. Además, España también perdió en 2010 la delantera en lo relativo al registro de patentes tecnológicas.
En lo relativo a publicaciones científicas, España se sitúa por delante, con 1,14 publicaciones por mil habitantes, mientras que China apenas supera las 0,3. Algo parecido ocurre con la proporción de investigadores.