Andre Kudelski: “Infravaloramos las amenazas del mundo conectado”

Antes, un hacker podía controlar un ordenador a distancia. Muy pronto, un hacker podrá controlar, "cualquier cosa", "Ya hemos visto que el sueño del coche conectado puede convertirse pronto en pesadilla. Esta nueva situación cambia las reglas de la guerra, tanto desde el punto de vista estratégico como de las empresas. Infravaloramos las amenazas del mundo conectado". Así de tajante se manifestó André Kudelski, CEO de Kudelski Group, en un artículo que firmaba para la CNBC desde el foro económ...

Antes, un hacker podía controlar un ordenador a distancia. Muy pronto, un hacker podrá controlar, "cualquier cosa", "Ya hemos visto que el sueño del coche conectado puede convertirse pronto en pesadilla. Esta nueva situación cambia las reglas de la guerra, tanto desde el punto de vista estratégico como de las empresas. Infravaloramos las amenazas del mundo conectado". Así de tajante se manifestó André Kudelski, CEO de Kudelski Group, en un artículo que firmaba para la CNBC desde el foro económico mundial en DAVOS el pasado mes de enero. "Dados los riesgos asimétricos creados por la cuarta revolución industrial, no podemos permitimos ser iletrados en seguridad". Kudelski fue ponente en el pasaod El País Retina, el foro iberoamericano de transformación digital de EL PAÍS. 

Kudelski cree que urge la necesidad de tomarse en serio lo antes posible la dimensión de las ciberamenazas. De hecho, las compara con la hecatombe que supuso la escalada tecnológica de la Segunda Guerra Mundial: "La sociedad no se ha dado cuenta aún de la increíble cantidad de escenarios posibles que se crean a través de esta nueva capacidad. En 1940, el ejército francés aún discutía sobre industrializar su producción de tanques mientras los alemanes trabajaban en los cohetes V1 y los aemericanos pensaban en la bomba atómica. Y ya sabemos cuál fue el resultado de la Segunda Guerra Mundial". Esta falta de preparación y preocupación afecta también al ámbito latinoamericano. El Informe Ciberseguridad 2016 elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Organización de los Estados Americanos (OEA) arrojaba un dato muy preocupante: el 80% de los gobiernos de la región suspendían en ciberseguridad.

La receta de Kudelski para remediar esta situación pasa antes que nada por una labor de comunicación que conciencie a la sociedad: "Prepararnos para esta situación sin precedentes requiere la mobilización de mentes y recursos, no solo en cuanto a gestión o infraestructuras, sino también al nivel del empleado o el ciudadano. Un smartphone perdido, una producción en línea conectada o un avión conectado pueden convertirse en un arma poderosa. Soluciones adecuadas llegarán tanto de iniciativas empresariales como políticas". La importancia de que los empleados de una compañía asuman unas normas básicas en ciberseguridad resultó evidente en el mayor ciberataque a una compañía, el que sufrió Sony Pictures el 24 de noviembre de 2014 a manos de un grupo de hackers norcoreanos denominados los Guardianes de la Paz.

Mientras la tecnología se hace más y más inteligente la seguridad se abre como desafío, para todos nosotros"

Lo peor de la tormenta está por llegar. El transporte conectado —no solo coches, sino también aviones— o el Internet de las cosas —el nuevo paradigma de objetos inteligentes que conectará cualquier utensilio de nuestro mundo físico al digital— supondrán nuevos desafíos para la ciberseguridad. Kudelski cree que solo mediante una cooperación más estrecha y mundial será posible enfrentarse a ellos: "Diversidad, sentido del propósito, respeto por las raíces de cada nación y una fuerte confianza en el futuro son los únicos ingredientes que pueden avivar la chispa de la respuesta política adecuada que reduzca la volatilidad. Mientras la tecnología se hace más y más inteligente la seguridad se abre como desafío, para todos nosotros".