Eurodiputados españoles piden a Rajoy que no firme el pacto con Turquía

Un nutrido grupo de eurodiputados españoles de todas las fuerzas políticas salvo el PP reclama al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, que exprese "el firme rechazo de España" al principio de acuerdo que se negoció el pasado 7 de enero entre la UE y Turquía, que se debatirá en la próxima cumbre europea, a partir del jueves. Hasta 32 miembros del Parlamento Europeo han enviado este marte...

Un nutrido grupo de eurodiputados españoles de todas las fuerzas políticas salvo el PP reclama al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, que exprese "el firme rechazo de España" al principio de acuerdo que se negoció el pasado 7 de enero entre la UE y Turquía, que se debatirá en la próxima cumbre europea, a partir del jueves. Hasta 32 miembros del Parlamento Europeo han enviado este martes una carta abierta a Rajoy en la que exponen que el pacto con Turquía "no respeta los derechos humanos" y "vulnera el derecho comunitario e internacional, que garantiza la protección de los refugiados y demandantes de asilo".

La presión sobre Rajoy arrecia. Esa carta replica una votación anterior en el Congreso de los Diputados, en la que todos los grupos políticos salvo el PP expresaron el mismo rechazo. El Gobierno en funciones reaccionó el lunes con la amenaza de bloquear el acuerdo con Turquía por razones parecidas a las que exponen los eurodiputados. Eso no ha bastado para que los eurodiputados del PP adhieran a esa iniciativa, impulsada por Ernest Urtasun (Iniciativa per Catalunya Verds).

Los eurodiputados reclaman a Rajoy que "muestre su disconformidad" en la cumbre y "traslade el sentir de una mayoría de ciudadanos que no quieren ver cómo se vulneran las más elementales normas de protección de los derechos humanos". Al igual que el Ejecutivo, apuntan que las expulsiones colectivas previstas en el preacuerdo —y que Bruselas descartará mañana miércoles— vulneran la Carta de Derechos Fundamentales de la UE y la convención de Ginebra. Sin embargo, a diferencia del Gobierno, los eurodiputados que firman la misiva consideran que Turquía no cumple los requisitos necesarios para ser declarado país seguro, lo que impediría devolver a suelo turco a los demandantes de asilo procedentes de la UE.