Desmontando bulos: seis jóvenes que desmienten a la ultraderecha

El acrónimo mena (Menores Extranjeros No Acompañados) era inicialmente un término jurídico que se utilizaba en el ámbito legal y en estudios sobre migraciones para designar a menores de edad que migraban solos. El término ha derivado en una forma de categorizar a este colectivo, ocultando los aspectos humanos y, sobre todo, escondiendo un hecho fundamental: que son niños y niñas desprotegidos y desatendidos que emprenden trayectos migratorios sin compañía ni cuidados de ningún adulto.

La estrategia utilizada por algunos medios de comunicación y partidos políticos ha sido la de hablar de menas para evitar así hablar de seres humanos, criminalizando y estigmatizando a los niños y niñas migrantes sin referentes familiares en España. La exclusión social a la que se ven expuestos, la falta de vías legales y seguras para entrar en el país y la irresponsabilidad institucional condena a muchos de ellos a la clandestinidad.

El tratamiento de los datos que VOX ha utilizado para elaborar el cartel de la campaña electoral en Madrid lo convierte en una simple mentira. Y a pesar de que esa actitud propagandística forma parte su ADN, debe lidiar con las consecuencias de que se desmonten públicamente sus bulos. La estrategia del partido va más allá al prescindir activamente de la verdad y busca la sorpresa, la indignación, la impotencia, el odio. Lo tiene todo como campaña publicitaria: la abuela indefensa con su pensión de 426 euros frente al peligroso joven migrante enmascarado y sus 4.700 euros al mes.

En otro intento por captar la atención, el partido de ultraderecha VOX dio a entender, con un cartel electoral abiertamente racista y falaz, que los menores extranjeros no acompañados le cuestan a la Comunidad de Madrid 4.700 euros mensuales. Según Gracia García Caro, directora de centros de menores de la Asociación Engloba en Andalucía, los datos utilizados por VOX se basan en mentiras: “Los menores no cobran, se les asigna una paga semanal que va por fases y que nunca supera los 10 euros a la semana, dependiendo, entre otros, de factores como el comportamiento y la conducta de cada uno”.

Además, los datos de la campaña son falsos al dar a entender que los menores extranjeros no acompañados cobran 4.700 euros al mes. “Ese cálculo corresponde a la licitación recibida por los centros de menores en la Comunidad de Madrid dividida por el número de usuarios, no a una percepción monetaria por parte del niño”, apunta García Caro. Según el último informe de marzo de 2021 de la Consejería de Políticas Sociales, Familias, Igualdad y Natalidad, en la Comunidad de Madrid hay tan solo 267 menores no acompañados. Ninguno de los protagonistas de este fotorreportaje recibe ni ha recibido un solo euro. Estos son los perfiles de seis jóvenes extutelados que llegaron a España siendo menores de edad. Sus historias desmienten de primera mano las afirmaciones lanzadas por la ultraderecha.

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