Brugada y Taboada miden fuerzas en un último debate por el Gobierno de Ciudad de México

Los candidatos al Gobierno de Ciudad de México medirán fuerzas este domingo en el tercer debate electoral. A tres semanas de la cita a las urnas, y con unas encuestas que prevén una brecha de apenas unos puntos, los aspirantes tendrán una última oportunidad para conquistar a aquellos votantes que aún no decidieron el destino de su voto. Clara Brugada, de la coalición oficialista Sigamos Haciendo Historia en la Ciudad de México, Santiago Taboada, de la alianza opositora Va por la CDMX, y Salomón Chertorivski, de Movimiento Ciudadano, tendrán que debatir en esta ocasión sobre seguridad y justicia en un primer bloque, y planeación de desarrollo inmobiliario en un segundo. Los nominados se juegan sus últimas cartas. Así como el debate anterior, que abarcó la situación del agua, la morenista estaba bajo la mira por la crisis que enfrentó el Ejecutivo capitalino con este recurso en la alcaldía Benito Juárez, los ojos están puestos ahora en su rival. La mochila más pesada que ha tenido que cargar el panista es justamente la red de corrupción inmobiliaria conocida como cartel inmobiliario, que hizo mella en las filas del Partido Acción Nacional.

Los temas del tercer debate caen mejor esta vez en el partido guinda, que esperan estar más a gusto que en los anteriores encuentros. Por un lado, la política de seguridad es algo que han pregonado en la capital, principalmente de la mano de Claudia Sheinbaum. Morena ha celebrado en múltiples ocasiones la reducción de los delitos de alto impacto en la ciudad y ha intentado colar la idea de que la metrópolis es una especie de oasis en medio de la crisis de inseguridad que atraviesa el resto del país. Sin embargo, el asunto ha sido un cuchillo de doble filo en la campaña de Brugada, cuyos asesores en un inicio le había recomendado no tocar el tema.

Donde podrá sacar más provecho la candidata de Morena será en el segundo bloque, uno de los puntos débiles de su principal contrincante. Aunque no queda claro aún cómo lo abordará. El Instituto Electoral de Ciudad de México le ha prohibido a la candidata y a su equipo asociar a Taboada con el cartel inmobiliario, dado que la justicia no ha sido capaz de acreditar esa relación hasta el momento. La decisión provocó el enojó de las filas guindas, que reprocharon al árbitro electoral sin éxito. Brugada podría optar por replicar algunas frases que evocan la idea, como la “priandilla inmobiliaria” —en referencia a la asociación del PRI y el PAN—, impulsadas estos días por el partido.

Taboada podrá jugar con la seguridad como estrategia a su favor, como lo ha intentado hacer su campaña desde el día uno. Uno de sus ejes electorales ha sido el de blindar la ciudad, como supuestamente lo hizo con su alcaldía. La Benito Juárez es uno de los municipios de todo el país donde está la menor percepción de inseguridad, según la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana. Solo un 15% de sus habitantes consideran que vivir allí no es seguro. Una retórica que Brugada ha intentado combatir. “No vale presumir con sombrero ajeno”, le dijo hace unas semanas y le reprochó que ese era un logro del Gobierno de la ciudad.

El candidato panista, sin embargo, tendrá su mayor desafío con el debate acerca de la planeación de desarrollo inmobiliario. Durante la Administración de Sheinbaum en la ciudad, las autoridades destaparon una red que traficaba con permisos para autorizar pisos extras en las construcciones en Benito Juárez a cambio de sobornos, que muchas veces llegaban en forma de departamentos. Los millones de pesos que mueve el negocio inmobiliario en la capital quedaron bajo la lupa y una veintena de personas fue encarcelada por este caso de corrupción, entre ellos, algunos funcionarios de las distintas administraciones del PAN en esa demarcación.

En medio de la disputa estará Chertorivski, que ha salido airoso de los otros encuentros, pero no lo suficiente para ganar más puntos en la contienda. Al menos eso señalan las encuestas hasta ahora. En todos los debates, ha sabido explicar su plataforma electoral mientras sus dos contrincantes se enzarzaban en una pelea por quién ganaba o no el encuentro. El exsecretario de Finanzas de la ciudad —funcionario de la Administración de Miguel Ángel Mancera— ha intentado distinguir su propuesta en seguridad de la de sus rivales. Ha dicho que hay poner el foco ya no en los delitos y su reducción, sino en los criminales, que acaban siendo reincidentes.

Desde que los números entre la puntera y el segundo en las encuestas comenzaron a acercarse los aires se han ido tensando. Los ataques también se convertido en algo más asiduo. Santiago “Tajada”, le lanzó la morenista en el primer encuentro. “Turbia” Brugada, le respondió el panista en el segundo evento. Mientras, en alguna ocasión, Chertorivski sacó unas palomitas de maíz y veía cómo los insultos le pasaban a él de lejos, así como las posibilidades de triunfar el 2 de junio. Los ánimos no llegan más calmos para el debate de este domingo. Si algo, más tiesos.

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