Videocolumna | Trump y los gigantes de la tecnología
El presidente pasó de una larga enemistad con los fundadores de las compañías a sentarlos a la mesa de las decisiones
En años recientes, el movimiento conservador de los Estados Unidos ha tenido una relación difícil con las grandes empresas tecnológicas, a quienes consideran cómplices y amigos del sistema liberal al que tratan de combatir. Algunos aliados del presidente Donald Trump han construido su carrera pública siendo antagonistas de estas compañías, tales como J. D. Vance, hoy vicepresidente de los Estados Unidos.
Durante su primer periodo en la Casa Blanca, Donald Trump se montó en esta narrativa para conseguir votos cruciales de la derecha conservadora. Tuvo relaciones difíciles con el fundador de Meta, Mark Zuckerberg, los fundadores de Twitter (ahora X) y hasta hace poco, con el gigante chino, TikTok.
Hoy, las cosas lucen distintas. Sin la necesidad de pensar en una reelección, Trump decidió sentar a la mesa de las decisiones a estas empresas, entendiendo que lo más importante es controlar la conversación en estas plataformas, en donde se libra la batalla real de las narrativas.