¿Cómo se elige al rector de la UNAM?

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) culminó con proceso de sucesión en busca de un nuevo rector, el jefe y representante legal de la Universidad. Tras ocho años en el cargo, el máximo estipulado por la legislación universitaria, Enrique Graue Wiechers dejará la rectoría y será relevado a partir del próximo 17 de noviembre por Leonardo Lomelí Vanegas, elegido por la Junta de Gobierno, un órgano compuesto por 15 miembros de la comunidad académica designados por el Consejo Universitario, con un cargo honorario que se renueva anualmente con la salida del miembro de mayor antigüedad.

Los requisitos para llegar a rectoría

Para aspirar a la rectoría, la legislación universitaria exige ser mexicano por nacimiento, tener más de 35 y menos de 70 años, poseer un grado universitario superior al de bachiller y como último requisito, “haberse distinguido en su especialidad, o haber prestado servicios docentes o de investigación en la Universidad, o demostrado en otra forma, interés en los asuntos universitarios”, además de “gozar de estimación general como persona honorable o prudente”. La persona al frente de la rectoría también preside el Consejo Universitario y su encargo se extiende por cuatro años, con la posibilidad de reelegirse una sola vez.

Antes de Lomelí Vanegas, Graue Wiechers, oftalmólogo de profesión y académico de la Facultad de Medicina, relevó a José Narro Robles en la última alternancia que experimentó la UNAM, hace ocho años. De 2015 a 2019, Graue ostentó el cargo durante un primer periodo y resultó reelecto para un segundo cuatrienio, de 2019 a 2023.

El 14 de agosto, la Junta de Gobierno anunció mediante un comunicado que adelantará dos meses el proceso para elegir al nuevo rector para el cuatrienio 2023-2027. Una semana después, la UNAM publicó la convocatoria oficial con los plazos y formas que deberán cumplir los aspirantes a encabezar la mayor universidad de Latinoamérica, una comunidad conformada por más de 373.000 estudiantes y 42.190 académicos.

El proceso para designar al nuevo rector

Recepción de opiniones y postulaciones

El primer paso supone un llamado a la comunidad universitaria para enviar por escrito los nombres de las personas que consideran aptas para ocupar el cargo y los motivos de la postulación. De acuerdo con la última convocatoria, la Junta de Gobierno recibió cartas para este propósito desde el 21 de agosto y hasta el 3 de noviembre. Las opiniones se enviaron firmadas especificando la relación que el remitente guarda con la Universidad al correo juntadegobierno@unam.mx.

Además de las opiniones escritas, la Junta de Gobierno formó comisiones para “escuchar presencialmente la opinión de la comunidad”. Las entrevistas se llevaron a cabo en los días hábiles del 21 de agosto al 9 de octubre. En la elección anterior, cuando el órgano votó por extender a un segundo periodo la gestión de Graue, la Junta de Gobierno aseguró haber atendido más de 850 entrevistas con la participación, presencial o escrita, de más de 16.500 miembros de la comunidad universitaria.

Las personas interesadas en ostentar el cargo que cumplieron con los requisitos también pudieron postularse al entregar su currículum acompañado de una semblanza profesional, un proyecto de trabajo que comprenda el periodo 2023-2027 y una síntesis del mismo. La fecha límite para compartir estos documentos, que se pusieron a disposición de la comunidad universitaria para su consulta en el sitio web de la Junta de Gobierno, fue el 4 de septiembre a las 18.00 horas.

Presentación de candidatos

El 12 de octubre, la Junta de Gobierno dio a conocer públicamente los nombres de quienes consideró que cumplieron con los requisitos y el perfil adecuado para ocupar el cargo. Una semana y media después, el 23 de octubre, el órgano se entrevistó con los candidatos con el fin de conocer sus proyectos para la Universidad.

Votación y nombramiento de la rectoría

Finalmente, la Junta de Gobierno se reunió a puerta cerrada para votar por el próximo rector. De acuerdo con la legislación universitaria, es necesaria una mayoría calificada de diez votos (entre los 15 miembros de la Junta) para nombrar al nuevo jefe máximo de la Universidad.

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