Blinken se reúne con Netanyahu en Israel en plena intensificación del ataque sobre Gaza
La ONU denuncia la situación en la Franja: “El olor a muerte está por todas partes, los cuerpos yacen tirados por las calles”
En su 11º viaje a la región desde el inicio la contienda, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha llegado este martes a Israel en un intento de resucitar la desvanecida esperanza de un posible alto el fuego en Gaza mientras se suceden los ataques israelíes en Líbano y se intensifica la ofensiva en la Franja. Blinken ha llegado a la región menos de una semana después de que Israel eliminara en el enclave palestino al lí...
En su 11º viaje a la región desde el inicio la contienda, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, ha llegado este martes a Israel en un intento de resucitar la desvanecida esperanza de un posible alto el fuego en Gaza mientras se suceden los ataques israelíes en Líbano y se intensifica la ofensiva en la Franja. Blinken ha llegado a la región menos de una semana después de que Israel eliminara en el enclave palestino al líder de Hamás, Yahia Sinwar.
El jefe de la diplomacia estadounidense le ha pedido al primer ministro, Benjamín Netanyahu, durante un encuentro en Jerusalén, que aproveche la oportunidad que supone la muerte del dirigente fundamentalista para impulsar una tregua y favorecer la salida de rehenes, según palabras del portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Blinken también se ha referido a la necesidad de que Israel dé nuevos pasos para aplacar la crisis humanitaria en el enclave y prepare un plan sobre el futuro de Gaza y los palestinos una vez concluida la guerra. Asimismo, ambos dirigentes abordaron una posible salida diplomática a la guerra en Líbano, país que sigue siendo golpeado a diario con bombardeos desde el aire y que ha sido ya invadido por tropas terrestres israelíes.
El comunicado sobre el encuentro emitido por la oficina del primer ministro Netanyahu no hace ninguna referencia a la crisis humanitaria en la Franja; sí menciona la ofensiva en el enclave (donde se han registrado ya más de 42.700 muertos y más de 100.000 heridos) y el escenario posbélico, la guerra en Líbano, la liberación pendiente de los rehenes en manos de Hamás y la respuesta que se prepara con conocimiento de Washington tras el ataque con misiles de Irán el 1 de octubre. Israel ha agradecido a Estados Unidos que expresara una “profunda conmoción” sobre el ataque con drones que lanzó la semana pasada de Hezbolá contra una residencia privada de Netanyahu y que fue calificado de intento de asesinato. Este martes, las autoridades han reconocido que uno de los aparatos impactó directamente en el chalé del mandatario, ubicado en Cesárea, al norte de Tel Aviv, según medios locales.
El optimismo generado, incluso en la Casa Blanca, en torno a la oportunidad para buscar una tregua tras la eliminación a manos de soldados israelíes de Yahia Sinwar, no ha pasado aún del plano de los deseos. Sobre el terreno, la orden de Netanyahu es mantener la presión militar en Gaza al más alto nivel. En las últimas horas, el ejército israelí ha emitido una nueva orden de evacuación forzosa de vecinos de la localidad de Beit Lahia, en el norte. Se suceden, además, las imágenes de grupos de gazatíes empujados a dirigirse hacia el sur por las tropas de ocupación de una zona, la septentrional, en la que Naciones Unidas sigue denunciado la falta de lo más básico para la supervivencia —agua, comida y atención médica— por el bloqueo que impone Israel.
En sus viajes a la región desde que comenzó la guerra el 7 de octubre de 2023, Blinken ha intentado sacar de sus posiciones a las partes enfrentadas. Hasta ahora, solo se ha producido una semana de alto el fuego, a finales de noviembre pasado, cuando tuvo lugar un intercambio de secuestrados por prisioneros palestinos. La desaparición de Sinwar no facilita las gestiones para que haya una tregua que posibilite la liberación de los cautivos, ha dicho Jalil Khaya, responsable político de Hamás. De hecho, una de las incógnitas es quién va a llevar las riendas de las negociaciones por parte del movimiento, que no ha nombrado todavía al sucesor de Sinwar.
La situación en la Franja, mientras, no deja de empeorar. “El olor a muerte está por todas partes, los cuerpos yacen tirados por las calles o bajo los escombros, y se niegan las misiones para retirar los cadáveres o prestar asistencia humanitaria”, denuncia en un comunicado el jefe de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, Philippe Lazzarini, a través de su cuenta de X (antes Twitter). “En el norte de Gaza, la gente simplemente espera morir”, agrega al tiempo que reclama una tregua “aunque sea de unas pocas horas”.
Las autoridades sanitarias del Gobierno de Hamás han informado de al menos 115 muertos en los dos últimos días y afirman, en un comunicado, que el hospital Kamal Adwan, uno de los tres principales del norte, está en situación “más que catastrófica”. Uno de sus accesos, añaden, ha sido atacado con bombas desde drones israelíes que no han llegado a explotar mientras se suceden los disparos a las plantas superiores. Cruz Roja, desde Ciudad de Gaza, alerta también de la situación para la población civil y del riesgo que supone para sus equipos trabajar en la zona.
Los más de 12 meses de guerra han desplomado los índices de desarrollo en la Franja hasta niveles de 1950 y el producto interior bruto ha caído un 35%, según un estudio de la agencia de la ONU para el Desarrollo (UNDP, por sus siglas en inglés), informa la agencia Reuters. La pobreza ronda ya el 100% y el desempleo es del 80%; la recuperación económica no llegará al menos en una década.
Alerta
Poco antes de la llegada a Israel de Blinken, que ahora visitará también Jordania, Egipto y Qatar, Hezbolá ha reivindicado un ataque con misiles sobre unas instalaciones militares de Tel Aviv y una base naval de Haifa —la primera y la tercera ciudad de Israel, respectivamente—, que no ha causado daños ni víctimas mortales, pero que sí ha puesto al país en alerta.
En ese frente del norte, la fuerza aérea israelí ha seguido golpeando diferentes objetivos de Hezbolá en territorio libanés. Al menos 18 personas han muerto y decenas han resultado heridas en la mañana del martes en un bombardeo en el entorno del hospital público Rafik Hariri de Beirut, según el Ministerio de Sanidad. El Gobierno ha informado de al menos 63 muertos en las últimas 24 horas por ataques israelíes, lo que eleva el número total de fallecidos a 2.530.
El enviado especial de la Casa Blanca Amos Hochstein visitó el lunes Líbano con nuevas exigencias israelíes, según adelantó el medio Axios. Israel pretende libertad de acción en el espacio aéreo de Líbano y que su ejército participe en la “aplicación activa” de la resolución 1.701 del Consejo de Seguridad. Esta puso fin a la guerra entre los israelíes y Hezbolá en 2006 y reforzó la misión de paz de la ONU en el sur de Líbano.