Boeing recomienda la inmovilización de sus 128 aviones 777 del modelo que sufrió el incidente en Denver

El desperfecto del motor provocó la caída de trozos del aparato en una zona residencial tras el despegue, pero el aparato pudo volver a la pista de aterrizaje sin provocar ningún herido

Washington -
Una imagen del fallo del Boeing 777-200 que despegó del aeropuerto internacional de Denver, este sábado.Hayden Smith (EFE)

El fallo del motor en pleno vuelo de un avión Boeing 777 de United Airlines el pasado sábado al poco de despegar de Denver (Colorado) ha encendido las alarmas, pese a no haber provocado muertos ni heridos. La compañía aérea anunció este domingo que ha decidido dejar en tierra las 24 aeronaves que tiene del modelo que se estropeó, después de que la agencia federal de aviación (la FAA, en sus siglas en inglés) anunciase una inspección adic...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El fallo del motor en pleno vuelo de un avión Boeing 777 de United Airlines el pasado sábado al poco de despegar de Denver (Colorado) ha encendido las alarmas, pese a no haber provocado muertos ni heridos. La compañía aérea anunció este domingo que ha decidido dejar en tierra las 24 aeronaves que tiene del modelo que se estropeó, después de que la agencia federal de aviación (la FAA, en sus siglas en inglés) anunciase una inspección adicional de los jets. Poco después, Boeing recomendó suspender las operaciones de sus 128 aviones del modelo 777 con motores Pratt & Whitney tras el incidente del sábado. De los 128 aviones, 69 se encuentran en servicio y 59 en almacenamiento. Japón también ha decidido suspender la utilización mientras estudia nuevas medidas, según informa Reuters.

El suceso del sábado dio lugar a imágenes sorprendentes. Como consecuencia de la avería del motor, partes del avión cayeron sobre Denver y la policía de Broomfield, una localidad de las afueras, tuvo que pedir a la población que permaneciera en sus casas. En una de las fotografías se podía observar incluso cómo un trozo del motor había acabado cerca de una casa. Se trataba del vuelo 328 de las 13.30 (hora local), con destino a Honolulú (Hawái) de la compañía United Airlines. El avión era un Boeing 777 equipado con un motor de la marca Pratt & Whitney 4000.

El jefe de la FAA, Steve Dickson, afirmó en un comunicado que la agencia de aviación civil estadounidense había revisado todos los datos de seguridad disponibles sobre la avería del sábado y, basándose en la primera información recabada, señalaba que debía “reforzarse la inspección sobre las aspas huecas del ventilador que son exclusivas de este modelo de motor, utilizado únicamente en los Boeing 777”. Según la agencia, solo aerolíneas en Estados Unidos, Japón y Corea del Sur utilizan los 777 con el tipo de motor P&W 4000 que sufrió la avería.

Los inspectores se reunieron durante el domingo con técnicos de la empresa fabricante del motor y de Boeing tratando de esclarecer lo sucedido. United Airlines, por su parte, recalcó la profesionalidad de su tripulación el sábado y recalcó que la seguridad es su “principal prioridad”.

Mientras, el Ministerio de Transporte de Japón ha ordenado a las aerolíneas Japan Airlines y ANA que suspendan el uso de los aviones 777 con dicho motor mientras se plantea adoptar otras medidas, según informa Reuters. El Gobierno recuerda que el pasado 4 de diciembre se produjo un incidente con un avión de la misma antigüedad que el que tuvo el problema el sábado. Se trataba en aquel caso de un vuelo de Japan Airlines que partía del aeropuerto de Naha con destino en Tokio que tuvo que regresar por el mal funcionamiento del motor izquierdo tras recorrer apenas 100 kilómetros.

El episodio tiene lugar después de una grave crisis sufrida por Boeing a raíz de los problemas del modelo 737 Max, que fue vetado de los cielos a comienzos de 2019 tras dos accidentes consecutivos que costaron la vida a más de 300 personas. Además de registrar unas pérdidas de miles de millones por la suspensión del aparato, que solo fue levantada a finales del año pasado, el gigante estadounidense de la aviación llegó a un acuerdo con el Departamento de Justicia a principios de año para pagar 2.500 millones de dólares, entre multas y compensaciones, para evitar ir a juicio. Ahora es el Boeing 777-200 el que pone contra las cuerdas al fabricante estadounidense. El 777-200 es el avión más grande que se ha utilizado desde 1990. De acuerdo con los datos de la empresa, los aviones han experimentado menos de un accidente importante por cada millón de salidas, una de las tasas de accidentes más bajas de cualquier avión comercial importante, según informa The Washington Post.

Sobre la firma

Más información

Archivado En