De víctimas a sospechosos de tres asesinatos, en una semana
Dos jóvenes canadienses pasan de ser buscados como desaparecidos en la Columbia Británica a convertirse en dos de los hombres más perseguidos por la policía
Kam McLeod y Bryer Schmegelsky, de 19 y 18 años respectivamente, se han convertido en objetivo prioritario de la Real Policía Montada de Canadá. Los dos jóvenes han pasado, en cuestión de días, de ser considerados dos víctimas más de una serie de homicidios en el norte de la Columbia Británica —una zona en la que los sucesos truculentos son infrecuentes— a ser catalogados como sujetos "muy peligrosos" por las fuerzas del orden.
El 15 de julio la policía canadiense halló los cuerpos de una pareja de turistas, Lucas Fowler —australiano de 23 años— y Chynna Deese —una mujer estadounidense de 24— al borde de una carretera al sur de Liard Hot Springs, en el extremo norte de la Columbia Británica. Habían sido acribillados a tiros horas antes o, a lo sumo, la noche anterior. Cuatro días después, a 470 kilómetros de ese lugar, fue encontrado un coche calcinado que, según los investigadores, pertenecía a Kam McLeod y Bryer Schmegelsky, dos jóvenes originarios de Port Alberni (en la isla de Vancouver, frente a la costa pacífica canadiense), que pasaron inmediatamente a integrar la lista de desaparecidos y posibles víctimas. Horas después, a dos kilómetros del automóvil, fue descubierto un tercer cuerpo: el de un hombre de unos 60 años.
La policía identificó a este tercer individuo como Leonard Dyck, de 64 años, originario de Vancouver, que impartía cursos de Botánica en la Universidad de la Columbia Británica. "Para nosotros, es muy infrecuente tener dos casos simultáneos de este tipo en el norte de la Columbia Británica. Reconocemos, por lo tanto, que pueden estar relacionados", dijo en conferencia de prensa Janelle Shoihet, sargenta de la Real Policía Montada de Canadá.
Sin embargo, una semana después del hallazgo de los dos primeros cadáveres, el pasado 23, las autoridades anunciaron que McLeod y Schmegelsky pasaban a ser los dos principales sospechosos de las tres muertes. Habían sido vistos primero en el norte de la provincia de Saskatchewan, al volante de un vehículo todoterreno gris y, posteriormente, en Gillam (Manitoba). Los padres de McLeod y Schmegelsky dijeron a la policía que los jóvenes habían viajado de Port Alberni con destino al Yukón para encontrar trabajo en el verano.
Este miércoles la policía informó de que otro vehículo calcinado, encontrado a las afueras de Gillam el día anterior, es el todoterreno utilizado por McLeod y Schmegelsky en su huida. Las fuerzas del orden peinan ahora la zona y han establecido controles en caminos y carreteras. Y solicitan encarecidamente a la población cualquier información que facilite la captura de los prófugos.
Poco a poco comienzan a aflorar detalles de los dos jóvenes, amigos muy cercanos desde la escuela primaria. Keith McLeod, padre de Kam, manifestó a la cadena CBC que su hijo es “un muchacho amable, considerado y cariñoso que siempre ha estado pendiente de los sentimientos de otras personas”. No obstante, las declaraciones del padre de Schmegelsky, Alan, a la agencia The Canadian Press presentan un panorama más sombrío: su hijo había tenido muchos problemas tras la separación de sus padres, en 2005, y encontró un refugio en YouTube y en los videojuegos. “Se encuentra en una misión suicida. Quiere que termine su dolor. Básicamente, va a morir hoy o mañana. Lo sé. Descansa en paz, Bryer. Te quiero. Siento mucho que todo esto tuviera que suceder”.
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