El oficialista PLD consolida su liderazgo en Dominicana

La victoria del partido de Leonel Fernández en las legislativas allana el camino hacia las presidenciales de 2012

El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) gobernará de nuevo con mayoría absoluta en el Congreso Nacional los dos años que faltan para las presidenciales de 2012, tras la aplastante victoria cosechada en las elecciones del pasado domingo. Sus candidatos obtuvieron 31 de 32 escaños del Senado en juego y, a falta de las cifras finales, en la Cámara de Diputados su representación mostrará un panorama igualmente apabullante. El Partido Revolucionario Dominicano (PRD), principal de la oposición, se quedó sin representación senatorial en lo que supone un varapalo para el que sus dirigentes solo e...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El Partido de la Liberación Dominicana (PLD) gobernará de nuevo con mayoría absoluta en el Congreso Nacional los dos años que faltan para las presidenciales de 2012, tras la aplastante victoria cosechada en las elecciones del pasado domingo. Sus candidatos obtuvieron 31 de 32 escaños del Senado en juego y, a falta de las cifras finales, en la Cámara de Diputados su representación mostrará un panorama igualmente apabullante. El Partido Revolucionario Dominicano (PRD), principal de la oposición, se quedó sin representación senatorial en lo que supone un varapalo para el que sus dirigentes solo esgrimen una justificación: la formación en el poder abusó de los recursos del Estado a favor de sus candidatos.

Más información

La jornada electoral estuvo marcada por un alto nivel de abstención, superior al 50%. Varios incidentes se saldaron con cinco muertos. Los grupos de observadores lamentaron la violencia en el proceso y reconocieron otras anomalías destinadas a alterar los resultados, aunque consideraron que eran hechos aislados. Los pronósticos del PLD se cumplieron con creces. Sus encuestas de campaña otorgaban a sus candidatos entre 28 y 31 escaños para las elecciones congresuales y municipales del domingo. Solo se le resistió la provincia de La Altagracia, bastión del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC).

En el ámbito municipal, las cosas le fueron igual de bien en números, si bien sufrió una pérdida trascendental al ceder el Gobierno de la ciudad de Santiago de los Caballeros, segunda en importancia del país. Al final de la jornada, el PLD obtendrá en torno al centenar de alcaldías de un total de 155. Pero lo ocurrido en la Ciudad Corazón le duele y supone un duro revés no solo para el partido, sino también para el propio mandatario. Haber apoyado al candidato reformista, José Enrique Sued, en lugar de al de su propia formación política, Gilberto Serrulle, ha pasado y seguramente pasará factura, fuera y dentro de la organización.

Los resultados del escrutinio, reñido por momentos, han dado la victoria a un Serrulle que se sintió traicionado por los suyos y optó por irse con el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), principal bloque de oposición, al que ha dado una victoria impensable en otras circunstancias.Precisamente, el PRD tendrá que revisar las cuentas tras la, en cierto modo, humillante derrota. El escrutinio le deja sin senadores, aunque de acuerdo a sus declaraciones puede haber obtenido más diputados que hace cuatro años, y también más alcaldes. En todo caso, insuficiente para tratar de esconder una paliza electoral que Miguel Vargas Maldonado, su presidente, justifica con el mismo argumento usado en la campaña: el Gobierno usó recursos del Estado para apoyar a los candidatos de su partido. A la hora de reconocer la victoria del PLD, el aspirante a la presidencia en 2012 aprovechó para pedir reformas del sistema de partidos.

Cinco muertos en enfrentamientos violentos

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

El hecho más lamentable de la jornada electoral fue la muerte de cinco personas en diferentes enfrentamientos violentos. La delegación de observadores internacionales bajo la bandera de la Organización de Estados Americanos (OEA) lamentó los actos de violencia que empañaron un proceso en el que también fueron testigos de intentos de trampa, como la compra de cédulas o documentos de identidad de votantes para impedir su voto, si bien los calificaron de aislados y no determinantes para los resultados finales de las votaciones.

Ahora comienza un plazo de tres meses hasta que los cargos electos ocupen sus puestos, en los que permanecerán seis años gracias a la reforma constitucional de febrero. Luego, con las elecciones presidenciales y legislativas y municipales unificadas en el tiempo, se volverá a establecer el periodo de ejercicio de cuatro años. Pero, mientras tanto, el Ejecutivo que dirige Leonel Fernández seguirá contando con un Congreso a su favor, ahora de manera más contundente, para tramitar las reformas que tiene contempladas en sus planes de Gobierno.

El PLD se garantiza controlar el poder legislativo después de las elecciones presidenciales de 2012. Si el candidato de su partido vence en dichos comicios, contará con cuatro años de apoyo congresual. Si el que vence es de un partido de oposición, tendrá que tratar con un Congreso opositor.

Una simpatizante de Fernández sostiene su fotografía el domingo.REUTERS

Archivado En