Salma de Marruecos reaparece en público con sus hijos por primera vez en cinco años
La exesposa del rey Mohamed VI ha viajado a la isla griega de Mikonos con el príncipe heredero Hasán y la princesa Jadiya, y han ido acompañados de un séquito de 70 personas y tres camiones de enseres personales
Salma de Marruecos, exesposa del rey Mohamed VI, ha sido vista en público junto a sus hijos —el heredero del trono, Mulay Hasán, de 21 años, y Lala Jadiya, de 17—, por primera vez en cinco años, después de que se confirmara su separación del monarca de la dinastía alauí. Ambos príncipes viajaron el pasado viernes 5 de julio con su madre a la isla griega de Mikonos a bordo de un avión de la compañía Royal Air Maroc, según imágenes difundidas por el canal Mykonos Live TV, que muestran la salida del aeropuerto de una amplia caravana de vehículos de lujo con su séquito oficial, así como un paseo nocturno de los tres por el centro de la capital de la isla, seguidos por sus guardaespaldas. Lala Salma, de 46 años, asistió por última vez a un acto oficial en Rabat en 2017, dos años antes del que el entonces abogado del monarca marroquí en París, Éric Dupond-Moretti (actual ministro de Justicia francés), la definiera como “exesposa” en un comunicado oficial. Desde 2019, en Nueva York, no había vuelto a ser fotografiada con sus hijos, en un gesto que aparentemente vuelve a normalizar su relación con la familia real.
La salida de una caravana de una decena de berlinas Mercedes y todoterrenos Range Rover con los cristales tintados llamó la atención de los fotógrafos apostados este verano en el aeropuerto de Mikonos a la espera de llegada habitual de celebridades. Iban seguidos por varios microbuses con escoltas y asistentes y también por tres camiones cargados con enseres personales. Un despliegue de medio centenar de agentes de la policía griega les abrió paso, según informó la prensa local. Royal Air Maroc cubre la línea entre Casablanca y Atenas, pero no tiene otros vuelos regulares a Grecia.
Salma de Marruecos, cubierta con un chal rojo; el príncipe Hasán, enfundado en un polo negro, y su hermana Jadiya, ataviada con un veraniego vestido de tirantes, fueron vistos la misma noche del viernes en una concurrida zona turística de la ciudad. Deambularon con indumentaria informal entre las decenas de turistas, según se observa en las imágenes de televisión, donde los únicos paseantes trajeados visibles eran los guardaespaldas que les acompañaban.
Medios griegos como Greekreporter, aseguran que viajaron hasta la isla del Egeo junto con mayordomos, sirvientes, cocineros, entrenadores físicos y todo tipo de personal. También señalan que entre los enseres traídos desde Marruecos en un vuelo especial figuran muebles, sillones, retratos del rey Mohamed VI y alfombras, entre otros muchos objetos, así como comida y bebida. La villa privada que han alquilado junto al mar cuenta con acceso particular a la playa.
Después de 16 años de matrimonio con Mohamed VI, la revista española ¡Hola! anunció en 2018 la separación de la pareja reinante, sin que se haya producido hasta ahora una confirmación desde el palacio real ni se haya confirmado la retirada del título de princesa consorte. Nacida en el seno de una familia de clase media, la ingeniera informática Salma Bennani (su apellido de soltera) puso fin con su presencia a un tabú en la corte de Rabat, al asistir habitualmente a actos públicos junto con el monarca y encabezar por su cuenta actividades humanitarias y sociales, como las de la fundación contra el cáncer que lleva su nombre. El protocolo de la dinastía alauí relegaba hasta entonces al espacio privado a las esposas de los soberanos, como ocurrió con la madre del actual rey, Lala Latifa, fallecida el 29 de junio a los 78 años, quien vivió oculta a los ojos del público y sin que se conocieran imágenes oficiales de ella.
Supuesto veto real
Retirada de la escena oficial tras su separación, Salma de Marruecos permaneció largas temporadas sin haber sido vista en público, lo que dio pie a especulaciones en la prensa del corazón sobre un supuesto veto real a mantener el contacto con sus hijos, e incluso a un presunto confinamiento en dependencias del palacio real. En 2019 zanjó con las habladurías al dejarse ver junto con su hija Jadiya en un restaurante de la plaza de Yemaa el Fná de Marraquech, uno de los lugares más visitados por los turistas en Marruecos. Ese mismo año, fue fotografiada junto a sus dos hijos a la salida del hotel Ritz-Carlton de Nueva York, y también se dio cuenta en la prensa de su asistencia a la inauguración de una exposición y de su visita a un hospital.
El pasado enero, la esposa de Mohamed VI fue vista en las calles de Tánger, donde, según medios marroquíes, recibió muestras de afecto popular sin que quedara constancia gráfica. Lalla Salma ha quedado excluida a partir de su divorcio de las imágenes oficiales difundidas por la familia real marroquí, en las que figuran los dos hijos y los cuatro hermanos del monarca. El príncipe Mulay Rachid, tercero en la línea de sucesión al trono, acompaña habitualmente a su hermano Mohamed VI y al heredero Mulay Hasán en los actos más relevantes. Las princesas Meriem, Asma y Hasna, suelen limitarse a participar en actividades culturales y de beneficencia, aunque el pasado febrero las tres hermanas del soberano fueron recibidas en el palacio del Elíseo por la primera dama, Brigitte Macron, en un encuentro privado que marcó el acercamiento entre Rabat y París tras casi dos años de tensión diplomática con el Sáhara Occidental como telón de fondo.
Lalla Salma es una gran aficionada a las escapadas turísticas a Grecia. La prensa griega informó en 2019 de que había veraneado con su hijo Hasán a bordo de un yate cuyo alquiler costaba más de 500.000 euros por semana. En 2017, el portal digital informativo marroquí Le Desk revelaba que la princesa consorte había adquirido por 3,8 millones de euros un chalé para pasar las vacaciones en la isla de Kea que, como Mikonos, también está situada en el archipiélago de la Cícladas. Mohamed VI, por su parte, ha regresado esta semana a su residencia de verano en la costa mediterránea próxima a Tetuán, no lejos de la ciudad autónoma norteafricana española de Ceuta, tras varias jornadas de luto en la capital marroquí a causa del fallecimiento de su madre.