El polémico anuncio de Pepsi con el que Madonna presentó ‘Like a Prayer’ vuelve a ver la luz 34 años después de que fuera censurado

La compañía de bebidas retiró la campaña un día después de las críticas del Vaticano al videoclip de la cantante. “Así comenzó mi ilustre carrera como artista, negándome a comprometer mi integridad física”, ha recordado la artista sobre la colaboración

Un fragmento del anuncio de Madonna para Pepsi, de 1989.

Corría el año 1989, y la comunidad religiosa unió sus fuerzas para que el anuncio de Pepsi en el que Madonna presentaba su single Like a Prayer fuera cancelado por la difusión de imágenes religiosas. Y lo lograron. El pasado martes, durante la gala de los MTV Video Music Awards, el vídeo por fin vio la luz después de 34 años de censura. La conocida como la reina del pop, de 65 años, ha querido agradecer de primera mano a la mar...

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Corría el año 1989, y la comunidad religiosa unió sus fuerzas para que el anuncio de Pepsi en el que Madonna presentaba su single Like a Prayer fuera cancelado por la difusión de imágenes religiosas. Y lo lograron. El pasado martes, durante la gala de los MTV Video Music Awards, el vídeo por fin vio la luz después de 34 años de censura. La conocida como la reina del pop, de 65 años, ha querido agradecer de primera mano a la marca que el anuncio haya resurgido del olvido y, al mismo tiempo, ha aprovechado para lanzar un mensaje de reflexión sobre su propio legado artístico. “El anuncio fue inmediatamente cancelado cuando me negué a cambiar ninguna escena del vídeo en el que besaba a un santo negro o quemaba crucifijos. Así comenzó mi ilustre carrera como artista, negándome a comprometer mi integridad física”, reflexiona la vocalista de temas mundialmente conocidos como Like a Virgin o La Isla Bonita en su Instagram. “Gracias Pepsi por finalmente darte cuenta de la genialidad de nuestra colaboración. Los artistas están aquí para alterar la paz”, concluye el mensaje de agradecimiento, publicado ayer, junto a un fragmento del anuncio. Tal fue la controversia mediática que el mismísimo Vaticano condenó el vídeo por “contenido blasfemo”, y llamó a la comunidad católica a boicotear a la artista no consumiendo ni su música ni “nada que guardara relación con ella”.

Madonna no pudo estar presente en la gala de los MTV Music Awards, ya que se encuentra preparando su nueva gira internacional Celebration Tour, en la que va a visitar 35 ciudades y que dará inicio el próximo 14 de octubre en Londres. Según la revista People, la artista está “ilusionada y preparada para recorrer carreteras e interpretar sus nuevas y antiguas canciones favoritas”. La artista volvió al trabajo el lunes pasado, después de sufrir una infección bacteriana cuyas complicaciones provocaron su ingreso en la UCI.

El controvertido anuncio, filmado principalmente en blanco y negro, y con una duración aproximada de dos minutos, muestra a una joven Madonna sentada frente a un televisor con una Pepsi en la mano mientras mira ese mismo anuncio, donde se la ve bailando Like A Prayer en calles oscuras y luciendo enormes colgantes con cruces plateadas y un corsé negro ―prenda a la moda en la época―. Según los informes consultados por Daily Mail, la empresa de bebidas pagó entonces más de cinco millones de dólares para que fuera su imagen. Finalmente, el polémico videoclip ―que se hizo público un día después que el anuncio―, obligó a Pepsi a dejar de difundirlo.

Justo antes de dar la bienvenida a la década de los noventa, Madonna calentaba motores para el lanzamiento de su cuarto álbum de estudio: Like a Prayer, que finalmente salió a la venta el 20 de marzo de 1989. La cantante quiso mostrar cómo la religión influía en su vida cotidiana, por lo que compuso el polémico single desde la “perspectiva de una mujer enamorada de Jesús”. La artista dedicó el disco a su madre, que murió cuando ella tan solo tenía 5 años.

La respuesta crítica del público católico no tardó en llegar, pues la artista aparecía en el videoclip acompañada de una iconografía católica; como cruces en llamas o estigmas en las manos. La trama muestra una evidente denuncia contra el racismo. A medida que avanza, Madonna es testigo del asesinato de una mujer a manos de unos delincuentes; sin embargo, la policía arresta a un hombre negro que había corrido a socorrerla. Es entonces cuando la protagonista acude a la Iglesia y venera a un santo negro que se llena de vida gracias a un beso de la cantante. Contra todo pronóstico, la canción se convirtió en uno de los singles más vendidos de la historia, y de su carrera musical, alcanzando el número uno en las principales listas de éxitos. El álbum, que ha vendido más de 15 millones de copias, fue especialmente elogiado por la opinión pública. La revista Rolling Stone lo calificó como “lo más cerca que la música pop puede estar del arte”.

No es la primera vez que Pepsi se ve envuelta en una situación comprometida por la difusión de un anuncio. En 2017, la empresa se vio forzada a retirar un spot en el que la modelo Kendall Jenner abandona una sesión fotográfica para unirse a una protesta callejera en la que lograba reprimir la acción policial ofreciendo un refresco a un agente. El anuncio rápidamente fue tildado de “ofensivo” e “insensible” por usar las protestas raciales y movimientos de justicia social para vender la bebida, y, en consecuencia, “frivolizar” la lucha contra el racismo. La marca tuvo que tomar partido y cancelar la difusión del vídeo: “Pepsi quería proyectar un mensaje global de unidad, paz y entendimiento. Claramente no hemos cumplido con nuestros objetivos”. Además, pidió públicamente disculpas a la protagonista por “haberla puesto en esta situación”.

Madonna aprovechó de nuevo ese momento para cargar contra la censura. “Cuando te despiertas y te das cuenta que esta mierda no tiene ningún sentido”, escribió en un post de Instagram, en el que recordó la controversia con su propio anuncio: “Mi comercial de Pepsi fue retirado hace 30 años porque yo estaba besando a un santo negro #irónico”.

El éxito sin precedentes de la compañía de bebidas es producto de los grandes esfuerzos que la empresa invierte en sus campañas publicitarias. Fue la actriz Joan Crawford la primera en promover la bebida en sus películas. Desde entonces, una larga lista de celebridades, como Tina Turner, Michael Jackson o Cindy Crawford, ha protagonizado las campañas publicitarias de la marca.




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