El “despertar” de Demi Moore: nueva relación con el chef Daniel Humm y apoyo a Bruce Willis
A sus 59 años, la actriz deja atrás la espiral autodestructiva en la que estuvo sumida hace una década y recupera la ilusión junto al celebrado chef suizo, con tres estrellas Michelin
La propia Demi Moore calificó su reciente vuelta a la primera línea de la esfera pública como “un despertar más que como un regreso” y las últimas noticias sobre ella corroboran la clarividencia de esa nueva etapa vital. Según ha confirmado la revista Page Six, la estrella de películas como Ghost o La teniente O’Neil ha puesto fin a cerca de una década de soltería de la mano del afamado chef Dani...
La propia Demi Moore calificó su reciente vuelta a la primera línea de la esfera pública como “un despertar más que como un regreso” y las últimas noticias sobre ella corroboran la clarividencia de esa nueva etapa vital. Según ha confirmado la revista Page Six, la estrella de películas como Ghost o La teniente O’Neil ha puesto fin a cerca de una década de soltería de la mano del afamado chef Daniel Humm. El suizo de 46 años, galardonado con tres estrellas Michelin por su labor al frente del exclusivo restaurante neoyorquino Eleven Madison Park, ya se ha dejado ver junto a la intérprete, de 59, en la presentación de la colección otoño-invierno de Chloé durante la pasada semana de la moda de París. Aunque todavía no han oficializado la relación, la publicación sostiene que se extiende durante varios meses y que suelen mantener “románticas cenas” en el establecimiento del restaurador, conocido también por su trabajo filantrópico a través de su fundación Rethink Food, que aboga por un sistema alimentario más equitativo y sostenible.
Convertidos en los últimos años en verdaderas estrellas, no es de extrañar que el reciente predicamento público por la figura de los chefs se traslade también al ámbito de las conquistas mediáticas. Ahí están los casos de estrellas como Amy Schumer, Neil Patrick Harris, John Legend o la española Cristina Pedroche, todos inmersos en relaciones con cocineros de profesión. Moore, embajadora por excelencia en las colinas de Hollywood de la dieta crudivegana —basada en alimentos crudos o expuestos a muy bajas temperaturas—, no tendrá problemas a la hora de disfrutar del talento para los fogones de su nueva pareja.
El Eleven Madison Park es el único restaurante tres estrellas Michelin del mundo con una carta exclusivamente vegetariana, una apuesta implantada el pasado año tras el cierre forzado por la pandemia y que, en palabras de Humm, tiene como objetivo “reinventar la cocina y redefinir el lujo como una apuesta que sirva a un fin más alto”. Al frente del establecimiento desde 2006, hace solo cinco años logró el título de mejor restaurante del mundo según la lista de The World’s 50 Best.
Esta nueva ilusión sentimental supone un paso más en el renacimiento personal y profesional de Demi Moore, que parece haber dejado atrás la espiral autodestructiva que dominó su vida a principios de la pasada década tras poner punto y final a sus seis años de matrimonio con el actor Ashton Kutcher, motivado por una infidelidad de este. “Una parte de mi vida se estaba desmoronando. Ya no tenía carrera. Ni relación”, cuenta en su libro de memorias Inside Out, llegando a ser ingresada en una clínica de desintoxicación en 2021 por su adicción al alcohol y las drogas.
Si bien no ha vuelto a disfrutar de la posición de privilegio de la que gozara en la meca del cine durante la década de los noventa, y en la que llegó a erigirse como la actriz mejor pagada hasta la fecha gracias a filmes como Striptease, la de Nuevo México también ha logrado recuperar el pulso de su carrera interpretativa. En los últimos años salta con relativa facilidad entre papeles recurrentes en series de televisión y personajes secundarios en películas de corte independiente como su último proyecto, Please Baby Please, un surrealista drama queer que acaba de comenzar su recorrido festivalero. Actualmente se prepara para el rodaje de The Substance, una película de terror de corte feminista junto a Margaret Qualley (La asistenta).
Demi Moore también ha sido noticia estos días tras conocerse la retirada del cine de su ex, Bruce Willis, diagnosticado con afasia, una enfermedad cerebral que le afecta al habla y a la capacidad de escribir o comprender el lenguaje oral y escrito. El protagonista de La jungla de cristal, de 67 años, comparte con Moore tres hijas fruto de trece años de matrimonio y una estrechísima relación de amistad pese a su divorcio en el año 2000. Tal es su complicidad que incluso pasaron juntos las primeras semanas del confinamiento forzado por la pandemia después de que las restricciones de movilidad impidieran a Willis volver con su actual esposa, la modelo Emma Heming, a Los Ángeles. “Este es un momento muy desafiante para nuestra familia y estamos muy agradecidos por vuestro continuo amor, compasión y apoyo. Como Bruce siempre dice, ‘Vívelo’ y juntos planeamos hacer exactamente eso”, rezaba el comunicado firmado por la familia del intérprete y difundido también en la cuenta de Instagram de Demi Moore.
Con cerca de tres millones de seguidores, la estrella de Una proposición indecente se muestra muy activa en una red social que utiliza para compartir con sus seguidores sus quehaceres diarios y como plataforma de marketing de su otro gran desempeño profesional. Ignorando las duras críticas recibidas en el pasado por sus retoques estéticos, este pasado verano la actriz no dudó en lucir bikini junto a sus tres hijas, Rumer, Scout y Tallulah, de 33, 30 y 28 años respectivamente, para presentar la colección de la firma de moda de baño Andie Swim, de la que no solo es prescriptora sino también accionista. A solo unos meses de celebrar las seis décadas de vida, los anhelos de Demi Moore se antojan tan vigentes —y despiertos— como nunca.