Cientos de fósiles reconstruyen la historia paleontológica de Madrid

Mastodontes, dientes de sable y tortugas gigantes en la nueva sala dedicada a Emiliano Aguirre en el Museo Arqueológico y Paleontológico Regional

Exposición de fósiles en el Museo Arqueológico y Paleontológico Regional en Alcalá de Henares.Mario Torquemada

El Museo Arqueológico Regional será a partir de este jueves también paleontológico debido a la apertura de una nueva sala en la que se disponen centenares de fósiles de mastodontes, dientes de sable y tortugas gigantes que reconstruyen la historia paleontológica de Madrid. El histórico edificio, inaugurado el 25 de mayo de 1999 en Alcalá de Henares, cuenta con un claustro convertido en un gran auditorio y una gran sala multifuncional.

A estas instalaciones se le suma ahora un espacio que lleva el nombre del paleontólogo que descubrió los primeros fósiles del yacimiento burgalés de Atapu...

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El Museo Arqueológico Regional será a partir de este jueves también paleontológico debido a la apertura de una nueva sala en la que se disponen centenares de fósiles de mastodontes, dientes de sable y tortugas gigantes que reconstruyen la historia paleontológica de Madrid. El histórico edificio, inaugurado el 25 de mayo de 1999 en Alcalá de Henares, cuenta con un claustro convertido en un gran auditorio y una gran sala multifuncional.

A estas instalaciones se le suma ahora un espacio que lleva el nombre del paleontólogo que descubrió los primeros fósiles del yacimiento burgalés de Atapuerca, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco en el año 2000. Emiliano Aguirre falleció con 96 años el pasado mes de octubre en Madrid. El gallego dirigió las excavaciones en esta mina arqueológica entre 1976 y 1991 y fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica Técnica.

En esta exposición se presentan fósiles de elefantes gigantescos, comúnmente conocidos como mastodontes, de los que se recrean las huellas en tamaño real, y tigres de dientes de sable. Además, la serie acoge nuevas especies como las jirafas del Mioceno, periodo que comenzó hace 23 millones de años. Las reliquias están acompañadas por vídeos de reconstrucciones de los animales en su hábitat. Las réplicas han sido elaboradas por el ilustrador bilbaíno Mauricio Antón, que a sus 60 años ha colaborado en numerosas ocasiones con la revista National Geographic. “Los animales están completos y se conservan en unas condiciones excepcionales porque provienen de trampas naturales y fueron recubiertos con otros sedimentos, lo que hace que el grado de preservación sea espectacular”, explica su director Enrique Baquedano.

La exposición permanente del museo, que contaba con un número reducido de elementos paleontológicos, se inauguró en 2003. Con la reciente ampliación del recinto, la sala de 200 metros cuadrados que antes ocupaban las oficinas del centro se ha convertido en una exposición dedicada a la paleontología madrileña. El recorrido incluye una zona en la que se explica la historia de los descubrimientos y otra en la que se desarrolla la formación geológica del territorio de la región.

Por orden cronológico, se enumeran los descubrimientos paleontológicos de la era cenozoica, el periodo de los grandes mamíferos que abarca más de 16 millones de años, desde el inicio del Mioceno medio hasta la llegada de los humanos. “La Comunidad de Madrid es muy rica en yacimientos de esta etapa”, cuenta Baquedano. El experto señala el Cerro de los Batallones, situado en el municipio de Torrejón de Velasco, como uno de los yacimientos más importantes de la región. Aquí, el equipo del Museo de Ciencias Naturales dirigido por Jorge Morales, recientemente jubilado, lleva trabajando más de dos décadas.

Manuel Salesa y Pablo Peláez tomaron el relevo del paleontólogo español que lideró los descubrimientos en los 10 yacimientos del Cerro de los Batallones, una zona de gran interés taxonómico y tafonómico. Además de los fósiles extraídos en este territorio, la colección acoge otras piezas procedentes del yacimiento del Mioceno medio en Somosaguas y expone los restos de las tortugas gigantes encontradas durante las excavaciones de las obras de la Terminal 4 en Barajas en 1999.

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La sala Emiliano Aguirre de paleontología madrileña en el Museo de Arqueología Regional.Mario Torquemada

La muestra permite observar los ejemplares completos de los animales sobre vinilos superpuestos. De esta manera, los fósiles no han sufrido ninguna alteración: “Hasta los años cincuenta era muy frecuente meter hierros por dentro para darles forma. Antiguamente, los fósiles sufrían un daño tremendo porque se tenía que hacer un agujero”.

La paleontología como disciplina académica surgió en España a mediados del siglo XIX. Los primeros hallazgos en Madrid se encontraron en el yacimiento de San Isidro, en el valle del Manzanares. Este recorrido didáctico descubre la evolución del ecosistema madrileño a través de montajes anatómicos.

La consejera de Cultura, Turismo y Deporte de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, ha inaugurado este jueves la instalación: “La nueva sala no solo contribuye a conocer el estudio e investigación sobre nuestro pasado, sino que es un esfuerzo encomiable para darlo a conocer entre los madrileños”. Junto a ella, han acudido la directora general de Patrimonio Cultural, Elena Hernando; el director del Museo Arqueológico Regional, Enrique Baquedano, y el profesor de investigación del CSIC y asesor científico del nuevo espacio Jorge Morales. “Madrid antes del hombre era una anécdota, pero ahora empieza a ser igual de importante que la propia arqueología”, concluye el director del museo.

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