Carlota Escutia, premio Rey Jaime I de Medio Ambiente: “Hay que cambiar nuestros hábitos sin volver a las cavernas”
Los galardones científicos con la mayor dotación en España (100.000 euros) recaen también en Antonio Echavarren, Olympia Bover, Guillemo López-Bendito, Daniel Maspoch y Alfonso Jiménez
Los galardonados en la XXXV edición de los Premios Rey Jaume I han sido tres mujeres y tres hombres. Todos ellos recibirán 100.000 euros, la mayor dotación en España para unos galardones científicos (además de tecnológicos, y empresariales), que deberán emplear en parte para sus investigaciones y proyectos. Un jurado compuesto por 21 premios Nobel ha anunciado esta mañana en e...
Los galardonados en la XXXV edición de los Premios Rey Jaume I han sido tres mujeres y tres hombres. Todos ellos recibirán 100.000 euros, la mayor dotación en España para unos galardones científicos (además de tecnológicos, y empresariales), que deberán emplear en parte para sus investigaciones y proyectos. Un jurado compuesto por 21 premios Nobel ha anunciado esta mañana en el Palau de la Generalitat como ganadores a Antonio Echavarren Pablos, en la categoría de Investigación Básica; Olympia Bover Hidiroglu, en Economía; Guillermina López-Bendito, en Investigación Médica; Carlota Escutia Dotti, en Protección del Medio Ambiente; Daniel Maspoch Comamala, en Nuevas Tecnologías, y Alfonso Jiménez Rodríguez-Vila (Cascajares) en Emprendedor.
Javier Quesada, presidente ejecutivo de la Fundación Premios Jaume I, entidad privada que aporta la mayor parte de los recursos junto a la Generalitat, ha proclamado a los vencedores en un acto presidido por el presidente valenciano en funciones, el socialista Ximo Puig, y el vicepresidente de la fundación, el empresario naviero Vicente Boluda. Ambos han ensalzado la figura del científico Santiago Grisolía, fallecido el año pasado, como impulsor de estos galardones.
En Protección del Medio Ambiente, la distinguida es Carlota Escutia por sus contribuciones pioneras en la comprensión de las condiciones ambientales cambiantes en los mantos de hielos antárticos, el océano austral y la biota y su impacto en el sistema climático global. Doctora en Ciencias del Mar, tiene 63 años y su liderazgo de la revolucionaria Expedición 318 del Integrated Ocean Drilling Program permitió avanzar en el conocimiento de los niveles atmosféricos de (CO2) en la historia glacial del Cenozoico.
La doctora en Ciencias del Mar y actual investigadora en el Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra (IACT)-(CSIC), ha manifestado su satisfacción por el premio y por que las mujeres se hayan alzado con la mitad de los galardones. Ha señalado que se están dando respuestas al cambio climático, pero reclama “más acción y menos palabras” para evitar daños irreversibles: “No se trata de que volvamos a la edad de piedra y cavernas, pero tenemos que cambiar nuestros hábitos”. “Hoy la corriente negacionista en mínima en comparación con las personas que sí que entienden que nos estamos enfrentado a un reto muy importante y urgente como población humana como son los cambios del planeta”, ha agregado.
Por categorías, el galardón de Investigación Básica ha recaído en Antonio Echevarren, escogido por mayoría del jurado en reconocimiento de sus contribuciones a la química orgánica para producir medicinas y otros nuevos materiales. Doctor en Química por la Universidad Autónoma de Madrid, tiene 66 años e inició su carrera a los 33 en el CSIC. Su grupo fue uno de los pioneros en química del oro y logró descubrir que los catalizadores de oro son los más selectivos para la activación de alquinos.
El premio de Economía ha ido a parar a Olympia Bover, microeconomista aplicada que ha contribuido tanto en la comunidad académica como en el mundo de la política con importantes estudios empíricos de los mercados de trabajo, de la vivienda y del comportamiento de los hogares. Doctora en Economía por la London School of Economics, tiene 64 años y es economista del Banco de España desde 1991. Ocupa el séptimo puesto entre todos los economistas en España y el 24 entre las mujeres economistas de todo el mundo en el ranking RePEc. Olympia Bover ha defendido que las decisiones económicas “se deben apoyar en datos” y “no en lo que uno cree”, por lo que ha reivindicado deben apoyar en datos” y “no en lo que uno cree”, por lo que ha reivindicado que las administraciones compartan más información con los investigadores para poder estudiar mejor cómo afectarán las distintas coyunturas económicas afectarán a las familias.
Guillermina López-Bendito ha recibido el Jaume I en Investigación Médica por su estudio de los procesos que subyacen a la formación de las conexiones neuronales, al demostrar que son fundamentales para una función cerebral normal. Doctora en Neurociencias, tiene 47 años y sus hallazgos serán determinantes para la definición de futuras aproximaciones terapéuticas a las alteraciones del neurodesarrollo. Desde 2008 dirige el laboratorio de Desarrollo, Plasticidad y Reprogramación de Circuitos Sensoriales en el Instituto de Neurociencias de Alicante. En declaraciones a Europa Press ha apuntado que “aún queda mucho camino” por descubrir sobre el funcionamiento del cerebro a pesar de que es “gran jefe que dicta las normas” y que debe “ir bien para poder tener una vida saludable”. “Cada vez lo cuidamos más porque somos conscientes de lo que implica, tenemos que reducir nuestro estrés, pero es complicado en una sociedad que nos exige muchos”, ha constatado.
Por su parte, el premio de Nuevas Tecnologías ha sido concedido por unanimidad a Daniel Maspoch por sus logros en la administración de fármacos para el tratamiento de enfermedades como diabetes, esclerosis múltiple o distrofia muscular, además de su dedicación a la formación de personal y atracción de talento. Doctor en Ciencia de Materiales, tiene 47 años y cuenta con patentes y contratos con empresas para llevar su tecnología al público general.
Y el Jaume I al Emprendedor se ha otorgado a Alfonso Jiménez (50 años) como presidente de la empresa cárnica Cascajares. El jurado destaca su tenacidad y resiliencia en el desarrollo de su proyecto empresarial, su incansable búsqueda de la innovación en el sector de la alimentación, su conciencia medioambiental y su apoyo a la inserción de trabajadores con necesidades especiales. Era el pequeño de diez hermanos y empezó a emprender con 18 años, cuando su familia lo veía como “un loco inconsciente”, a partir de la idea de criar y comercializar capones ya cocinados y enlatados.
En su discurso, el presidente de la Generalitat hapuesto en valor el esfuerzo, la constancia y la determinación que les han hecho “ser merecedores de los premios más importantes de la Ciencia española” y ha agradecido el papel de los Jaume I, que “han sido, son y serán un faro que inspira a la sociedad valenciana y la referencia internacionalmente”. “La sociedad valenciana ha consolidado un camino del que no se puede desviar. Ya lo vimos en otro tiempo: los atajos abocan a precipicios, el cortoplacismo acaba despeñando el país”, ha advertido el presiente en funciones que el próximo traspasará la presidencia del Consell a Carlos Mazón, del PP, tras las elecciones del 28M.
Como vicepresidente de la fundación, Boluda ha querido transmitir un reconocimiento especial a Puig “de todo corazón” por su apoyo a los premios en sus ocho años al frente del Consell. “Puedo asegurar que lo ha hecho por convicción personal”, ha subrayado. Sus palabras han provocado un intenso aplauso en el auditorio.