Amnistiado el exsecretario de Deportes del Govern en un caso de desvío de fondos al ‘procés’

La jueza de instrucción ha amnistiado a Gerard Figueras, exsecretario de Deportes de la Generalitat bajo la presidencia de Quim Torra, en la causa en la que estaba investigado por el desvío de fondos al procés a través de la empresa pública que gestiona el Canal Olímpic de Castelldefels (Barcelona). En un auto, al que ha tenido acceso EFE, la jueza Alejandra Gil, que sustituye al magistrado Joaquín Aguirre -de baja- en el juzgado de instrucción número 1 de Barcelona acuerda archivar la causa, que es una derivada del caso Volhov sobre presunto desvío de fondos al procés, y aplicar la amnistía a Gerard Figueras, tal y como éste solicitó.

Figueras, junto a otros cargos del PDeCAT, fue detenido en noviembre de 2019 en el marco de la primera fase de la macrocausa que abrió el juez Joaquín Aguirre por presunto desvío de subvenciones públicas a fundaciones afines a CDC y al procés. La Fiscalía presentó en 2020 una querella contra Figueras -quien fue secretario de Acción Exterior del Govern entre 2021 y 2022- por los delitos de malversación, falsedad documental y tráfico de influencias ante las sospechas de que la empresa pública Equacat S.A. que gestiona el Canal Olímpic, participada por la Generalitat y el Incasol al 50%, se utilizó para financiar el procés con subvenciones públicas.

En concreto, la investigación puso de relieve que Figueras pidió supuestamente que se guardaran urnas en el Canal Olímpico y que Equacat pagó casi 18.000 euros a Unipost para llevar a cabo la distribución de papeletas del referéndum unilateral. Para la jueza, los hechos por los que Figueras era investigado “tienen encaje en el ámbito de aplicación de la ley de amnistía”, puesto que se trataría del uso de fondos públicos para procurar la independencia de Cataluña, “sin que conste propósito de enriquecimiento personal ni de obtener un beneficio personal patrimonial”.

Figueras figuraba como investigado en la macrocausa derivada de la operación Volhov, que en dos fases en 2019 y 2020 comportó la detención de cargos del entorno del expresidente catalán Carles Puigdemont y de miembros del “estado mayor” que organizó el 1-O, por el desvío de fondos al procés y su papel en las protestas de Tsunami Democràtic.

De esa macrocausa derivó también la pieza sobre la supuesta injerencia rusa en el procés, en la que el juez remitió al Supremo una exposición razonada con indicios a su parecer implicaban al expresident en los delitos de traición y malversación. Precisamente, ayer la Audiencia de Barcelona le ordenó cerrar definitivamente esa investigación.