La liga de debate de la cárcel de Quatre Camins: “Nadie vive en cautividad por voluntad propia”
La Universitat Pompeu Fabra organiza junto a la consejería de Justicia la octava edición de la competición de oratoria en centros penitenciarios catalanes
No todo son barrotes y celdas en la cárcel de Quatre Camins. El arte de la oratoria ha calado en la vida de los internos de este centro penitenciario de Granollers (Barcelona), donde el pasado jueves se celebró la octava edición de la Liga de Debate, organizada por la Universitat Pompeu Fabra y el departamento de Justicia de la Generalitat. Es la segunda en este centro. Seis equipos y 30 internos han logrado levantar a todo el salón de actos con su curtida capacidad de argumentar sobre un tema que interpela a la mayoría: ¿Hay que prohibir la presencia de animales en cautividad en zoológicos o reservas?
Los presos de Quatre Camins han dado un paso adelante en su reinserción tras haber entrenado durante un mes algo tan difícil como hablar en público. El jurado ha estado formado por el reconocido dramaturgo Paco Antón y los periodistas Espartac Peran y Elisenda Colell. “Es admirable cómo habéis conseguido romper el muro que separa el escenario de la platea”, ha remarcado Antón. Y es que los participantes no sólo han traspasado ese umbral, también han vencido al estigma asociado a su condición de interno. Almamy, miembro del equipo vencedor, El Rugit de Quatre Camins, ha cautivado al público con su desparpajo. “Me presenté porque creo que hablamos de un tema que puede hacer reflexionar a las personas, y eso que no es fácil defender una postura en la quizás no coincides. Nos hemos divertido mucho”, celebra.
Tampoco faltó el sentido del humor allí donde más falta hace. En el turno de las refutaciones, un participante del equipo contrario desató las carcajadas de los internos que los apoyaban desde las butacas: “Debemos endurecer las leyes contra el maltrato animal y la cautividad. La gente se las salta. Vosotros lo sabéis mejor que nadie”, dice en tono irónico aludiendo a sus compañeros.
El papel de los voluntarios de la UPF, capitanes de los equipos, y de las formadoras de la escuela Salvador Dalí, centro educativo del mismo centro, ha sido crucial para que la liga haya sido un éxito. Núria Via, estudiante de derecho y capitana del equipo Hakuna Matata, se ha mostrado visiblemente emocionada al contar cómo ha sido el proceso de formación. “Los primeros cuatro días son de entrenamiento. Les enseñamos a ordenar sus ideas, a estructurar argumentos y a refutarlos con fundamentos”. Lo que más ha enorgullecido a Via ha sido lograr que expresen sus argumentos en base a las ideas que más se acercan a sus valores. “La complicidad que se genera entre internos y voluntarios es increíble”, ha concluido.
Es la segunda edición que se celebra en Quatre Camins, pero en los centros penitenciarios de Brians y Brians 2 ya se han organizado dos y cuatro ligas de debate respectivamente. El director general del centro, Joan Pere Queralt, ha intervenido al final de la competición para poner en valor la educación como la más poderosa de las herramientas para lograr la reinserción de los internos. “No fue fácil organizarlo, pero teníamos claro que debíamos llevarlo a cabo. Esto tiene una dimensión enorme y debemos llevarlo a todo el territorio”, ha subrayado.
“El ser humano es el problema, pero puede ser la solución”, ha defendido Brian, miembro del equipo ganador. El anhelo de libertad ha estado presente en todas las argumentaciones, tanto de un equipo como del otro. Marc, orador de Animals Salvatges, se ha acercado al centro del escenario y ha hecho su última intervención: “Nadie vive en cautividad por voluntad propia. No lo olvidéis, ni pájaros sin cielo, ni orcas sin mar”.